Llevar al escenario los poemas de León Felipe ha sido para Héctor Alterio una necesidad. Y fruto de ese deseo surgió Como hace 3.000 años, con el que tiene ya fechas fijadas hasta final de año. La gira llega hoy a Arbolé (21.00 horas) con el actor, el guitarrista José Luis Merlín y la poesía como protagonistas.

-¿De dónde surge esa necesidad de llevar los poemas de León Felipe a escena?

-Surge desde mi infancia y mi adolescencia, cuando conocí a León Felipe en Buenos Aires, que estaba radicado o exiliado en México, venía con cierta frecuencia a Buenos Aires y yo quedé prendado de él, de sus poemas, sus versos... y todo eso se fue difuminando porque empecé a hacer teatro. No se me olvidó y quedó firme en mi mente y mi recuerdo. Con el paso del tiempo surgió la posibilidad de hacer recitales, pero ya estando yo aquí en España y así lo venimos haciendo un poco improvisadamente, tentando, eligiendo poemas. El resultado es una oferta realmente atractiva desde el punto de vista de la selección de los poemas. Entretiene mucho León Felipe, es muy cáustico por un lado, y muy sincero por otro; realmente tiene un gancho muy particular.

-¿Por qué es tan poco conocido en España?

-Parece como si fuera un poeta maldito. Tuvo que exiliarse durante la guerra civil y se radica en México y es allí donde es venerado y admirado. Hay un busto, una estatua de él, cosa que aquí no hay. Allí se lo venera y se lo respeta, pero de pronto a mí me tocó la suerte de ser el responsable de reeditarlo.

-Usted no recita, sino que interpreta.

-Yo no hago lo que se dice la métrica ni la manera de recitar los poemas, yo interpreto, soy actor. Lo que estoy leyendo me llena de tal manera que yo lo trasmito tal como lo siento. Mientras yo sienta que eso es verdad, el poema está interpretado por un actor que trata de emitir un concepto hecho por otro, que es León Felipe y así surge lo que yo considero la verdad, que se me crea lo que estoy diciendo.

-Lleva ya varios años con Como hace 3.000 años. ¿Ha cambiado con el paso del tiempo?

-Pienso que sí, se ha afirmado. Tengo la suerte de tener a José Luis Merlín, que además de acompañarme hace sus solos maravillosamente, es un eximio guitarrista y nosotros dos formamos este espectáculo de hora y media que da buen resultado.

-El espectáculo está centrado en León Felipe, sin embargo el título proviene de un poema de Esteban Agüero.

-Esteban Agüero es un poeta argentino nacido en la provincia de San Luis, de donde es José Luis Merlín y el me trajo ese poema que es, en cierta medida, una expresión de deseo. El título Como hace 3.000 años se refiere a que se juntaban para escuchar a Homero miles y miles de personas y es en cierta medida y exagerando un poco, lo que nos gustaría a nosotros, que se reúna mucha gente para escuchar poemas, como ocurría hace 3.000 años cuando escuchaban a Homero todo tipo de personas. De ahí el título de este poema, que también yo recito y que es el único agregado entre todos los poemas de León Felipe. Y nosotros seguimos esperando que esto pueda ocurrir (risas).

-¿Qué aporta José Luis Merlín? ¿Cómo se complementan los poemas con la música de Turina, Piazzolla, Tàrrega?

-Yo estoy extasiado cuando entre poema y poema puedo escuchar a José Luis Merlín cuando toca sus solos. El resto escucho por atrás una música que me conforta y enriquece mi trabajo.

-¿Cómo responde el público?

-Diría que es espontánea en cada final de poema y que es realmente agradecida cuando finalizamos y todo eso contribuye a que estamos en un camino cierto.

-Ha interpretado numerosos papeles para cine y teatro y ahora lo hace con poemas. ¿Alguna vez le ha dado por escribir poesía?

-(Risas) No.

-Ni siquiera en juventud...

--Cuando hacemos cosas que no debemos. Puede ser que haya hecho algo pero lo tengo olvidado (risas).

-Además de este trabajo, ¿qué tiene entre manos?

-Nada, en este momento nada más que esto porque tenemos fechas hasta fin de año cubiertas en distintas plazas. Con eso me basta.

-Espero que no le moleste la pregunta. ¿A sus 88 años, el cuerpo y la mente no le piden retirarse?

-(Risas) Hago oídos sordos. Si es que no me siento bien, la única posibilidad es no hacerlo, pero como me siento bien, me gusta y veo que le gusta al público, pues... además yo vivo de esto, necesito trabajar y en algo que me gusta mejor.

-Muchas actrices maduras se quejan de que no les ofrecen papeles acorde a su edad. ¿Le sucede a Héctor Alterio lo mismo?

-Yo no soy mujer... en principio. En serio, existen papeles lo que pasa es que dependerá un poco del actor, y cómo se siente haciendo una edad que no querría tener. Yo trato de sacar la verdad en un poema de León Felipe y lo mismo me ocurre en personajes que me ofrezcan. Acabo de hacer dos años una función de un autor francés, El padre y coincidimos con gente maravillosa.

-Precisamente compartió escenario con una aragonesa, Ana Labordeta.

-Sí, mi hija en la función. Yo si me ofrecen algo y puedo compatibilizarlo con este otro trabajo, lo haré, si no esperaré a que termine esto para hacer otra cosa.

-Por ir terminando, y como sé que es futbolero... ¿Argentina o España?

-Que no coincida ningún partido mientras siga la función. Tengo dos posibilidades siempre. Si no es uno es otro. Tanto uno como otro todavía no puedo saltar de alegría. Estoy bien, son accidentes, el de Messi, que erró un penalti y nosotros, que empatamos... España con Portugal. Son accidentes.