El camino de los ingleses , una novela coral de Antonio Soler (Málaga, 1956), ganó anoche el Premio Nadal de Novela, convocada por la editorial Destino en su 60 edición, a la que se presentaron 337 originales. Soler no es un desconocido en la actualidad literaria en castellano. Entre los premios que ha obtenido destacan el Herralde de novela (1996), de la editorial Anagrama, con Las bailarinas muertas , y el Premio Primavera, de Espasa Calpe (1999), con El nombre que ahora digo , que fue un best-seller . Antes, también había conseguido, el Ateneo de Valladolid; y, en su andalucía natal, el Premio Andalucía de Novela del año 1993, con Modelo de pasión , y el de la Crítica, en 1995, con Los héroes de la frontera .

El Premio Nadal es el galardón literario más antiguo de España, dotado con 18.000 euros (3.000.000 de pesetas). El ganador, a quien algunos adscriben al género de realismo tremendista, se define a sí mismo como un escritor que, dentro de ese tremendismo, utiliza ingredientes poéticos y oníricos. Soler reside en su Málaga natal, lejos de Barcelona y Madrid, los centros donde se elabora el pastel cultural. El ganador del año pasado fue Andrés Trapiello, con Los amigos del crimen perfecto .

Huérfano de padre, Antonio Soler devoraba desde que era un adolescente todo lo que caía en sus manos, según ha asegurado en numerosas ocasiones. Sin embargo, estudió Técnico en Actividades y Empresas Turísticas en la Escuela de Turismo de Málaga. Con 22 años tuvo un accidente de tráfico que le obligó a guardar cama durante un largo periodo. Aquí comenzó su pasión por la escritura y poco después se presentó al Premio Nacional de Relatos Ignacio Aldecoa en el que quedó finalista. Tras el servicio militar comenzó a escribir de continuo.

Soler recoge el testigo de Andrés Trapiello, ganador del año pasado con Los amigos del crimen perfecto .

El texto premiado plantea el tránsito entre la adolescencia y la edad adulta de un grupo de jóvenes. Todos tienen voz propia a lo largo de la trama. En ese tránsito vital, el autor describe el derrumbe de los sueños de unos adolescentes que no alcanzan las metas que se habían marcado. Es, por lo tanto, una historia (es decir varias historias) de desencanto en la que aquellos adolescentes acaban buscando refugio en la amistad.

Cada personaje que traspasa las páginas de la novela tiene su propio universo de amores, odios, contradicciones y desconciertos, debatiéndose entre la inocencia que se aleja y la madurez que se le echa encima. Es una tribu generacional, un grupo de amigos de la misma edad que comparten un mismo mundo de vivencias: primeros amores, sexo, conflictos, pero cada cual protagoniza su propia vida. No hay una trama central que conduzca esas vidas hacia una conclusión común.

LA OBRA FINALISTA

Sonríe Delgado , de Javier Puebla (Madrid, 1958), fue la obra finalista. Este polifacético personaje (en su currículo figuran actividades como escritor de novelas, ensayos, relatos breves, columnista de revistas y periódicos, guionista de televisión, director de cine, diplomático, cantante de rock y funambulista) está considerado como uno de los más destacado especialistas españoles en el relato corto, brevísimo.

En la novela finalista se refleja el carácter cosmopolita del autor, que ha vivido, entre otros sitios, en Dakar, Murcia, Nueva York, Barcelona y Madrid. Un personaje con un oscuro pasado se tropieza en una calle de Beirut con un moribundo que le ofrece un pacto: intercambiar sus personalidades. Así, el vivo limpiará su pasado con una nueva identidad a cambio de que mate a una mujer residente en Barcelona de la que el moribundo quiere vengarse. Sonríe Delgado es, por lo tanto, una comedia negra de enredo.

El premio Josep Pla de narrativa catalana en su 36 edición recayó La llibreta groga , de Robert Saladrigas. Escritor, periodista y crítico literario de renombre, Saladrigas ha publicado, entre otras muchas novelas, Aquell gust agre de l´estel , Memorial de Claudi M. Broch (Premi Nacional de la Crítica 1986), El sol de la tarda (Premi Sant Jordi 1992) y La mar no est mai sola (Premi Carlemany).