Con la exposición dedicada al personaje del doctor Uriel, que se inaugura hoy (19.00) en el Centro Joaquín Roncal, «mi padre vuelve a Zaragoza», dijo ayer visiblemente emocionada Elena Uriel, hija del médico que protagoniza la muestra. Una muestra que narra la vida de Uriel a lo largo de la guerra civil y que ha sido trasladada al cómic por el dibujante Sento Llobell, marido de Uriel.
«Fue emocionante» cuando le propusieron realizar esta muestra puesto que «mi padre no nació en Zaragoza, si no que nació en Soria pero siendo él pequeño su familia se vino aquí. Se dice que la patria de uno es donde estudia el Bachillerato y él lo hizo aquí. Salió al final de la guerra y ya no volvió», reconoció Elena Uriel, para quien esta muestra supone el regreso a casa de su padre -«su casa en Hernán Cortés sigue en pie»- y a cumplir uno de los deseos porque «desde la cárcel, él siempre hablaba de la calle Alfonso y decía que cuando saliera se iría a tomar allí un chocolate», recordó visiblemente emocionada.
La muestra, que lleva por título Dr. Uriel. Viñetas de la Guerra Civil, podrá verse hasta el 4 de enero, y recoge la historia de un médico novato cuyas primeras prácticas fueron en el peor escenario posible, la guerra civil española. Su periplo personal le llevó, además de Zaragoza, a lugares como Rincón de Soto, Belchite o Valencia, y permiten conocer, sobre todo a los jóvenes, una época de la historia de España a través de los ojos de un joven, porque todo lo que aparece está «documentado», aunque algunos detalles, se han ficcionado.
DIDÁCTICA
Pablo Uriel decidió publicar sus memorias años después y lo hizo con la novela No se fusila en domingo, gérmen de los cómics y de esta exposición. La muestra tiene un claro carácter didáctico, de hecho ya se han organizado unas visitas guiadas para más de 300 escolares de Educación Secundaria y Bachillerato.
«La guerra civil le queda muy lejos a los alumnos», sin embargo, con lo que se habla de la exhumación de Franco «parece que siga ahí, y todavía hay que escribir muchas verdades. Se ha escrito mucho por un bando, por parte del otro se empieza ahora y hay que encontrar el punto justo de la verdad», señaló Uriel, para luego, hacer hincapié en que «al margen de bandos, y de víctimas, el mensaje que mi padre daba en los libros que nos escribió -y lo hizo para que eso no volviera a pasar- era decir que las guerras no son buenas para nada y que siempre perdemos los de siempre». Elena Uriel señaló que hubo muchos «muertos anónimos. Mi padre era un anónimo que sobrevivió».
Elena Uriel presentó la exposición, junto a Elena Giner, concejal de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Zaragoza; y Antolín Terés, responsable de programación de los Centros Cívicos, porque la muestra se engloba dentro de los actos organizados por el consistorio en diciembre, convertido en el mes del cómic, con numerosos actos organizados por toda la ciudad y que tiene su punto culminante en el Salón del Cómic, que tendrá lugar del 14 al 16 de diciembre en la Multiusos.
La iniciativa comenzó «como un fin de semana pero ha crecido y desbordado incluso los continentes», señaló Giner. Terés, por su parte, señaló que se ha «desconcentrado» con actividades en Etopia, el hospital Miguel Servet, el Clínico, la Filmoteca, el Museo del fuego, diversos institutos o la Fnac.
PARA TODOS LOS GUSTOS
Entre los actos, además del recuerdo a Pablo Uriel, se rendirá homenaje a dos dibujantes recientemente fallecidos, Carlos Ezquerra y Stan Lee.
A finales de este mes se inaugurará en el C. C. Universidad una exposición de homenaje a Supermán, que mostrará 32 trabajos de autores aragoneses. También habrá talleres del cómic en el barrio Oliver, en el que participarán unos 100 escolares, que realizarán y editarán durante unos días un fanzine.
Etopia se suma a la celebración con las jornadas Transitando al cómic digital, en las que David López (28 de noviembre) hablará sobre el tránsito a la ilustración digital; David Daza (18 de diciembre) sobre cómic y storyboard con herramientos digitales.
La Filmoteca programará un ciclo (del 12 al 21 de diciembre) sobre la influencia de Moebius en el cine, con películas como Alien, Tron, El quinto elemento, Masters of time, Abyss o Willow. Como ya es habitual, el cómic llegará al Miguel Servet y al Hospital Clínico, con el enfermero Letro, dibujantes, cosplayers y la Legión 501.
Otros espacios que colaboran en las actividades son el Museo del fuego, con la muestra Entre el fuego y el humor; la Casa de los Morlanes, con Una visión del cómic en España; el IES Río Gállego, con Los 50 años de Mafalda; IES Valdespartera, con un Homenaje a Spiderman; el Pablo Gargallo, con la jornada El estado de la industria del cómic en España (1 de diciembre). También habrá talleres en el Museo del Teatro y un concurso de cómic contra la Violencia de género. El cómic sale de Zaragoza y llega a Huesca y Monzón con la muestra Cromos de leyenda.
