TITULO: Manuel Lahoz Villar

LUGAR: Sala de Arte Zeus, Paseo de la constitución, 28. Zaragoza.

FECHAS: Hasta el 29 de mayo

HORARIO: De lunes a sábado, 10.30 a 13.30 horas y tardes de 18.00 a 21.00 horas.

CONTENIDO: Los dibujos presentados deben ser entendidos como preludios a la técnica final del grabado. Están clasificados por temas: Religiosos, Tipos y figuras populares, Arquitecturas, Los toros, Los sueños de Quevedo, Vida de Don Quijote de Unamuno, Coplas de Jorge Manrique, Realismo alterado, Música y danza y Retratos.

Seres robustos con paraguas en avance contra el viento esquivo y destemplado. Seres humanos tercos en dirección contraria a los elementos. Decididos y feroces, como el único pretexto que les quedase para sentirse (aun sin rostro) erguidos y nobles. La decidida persistencia del hombre en agarrarse a la vida por vulgar que sea, más persistente cuanto más vulgar.

Lahoz capta esos movimientos sordos, oscuros y llenos de supersticiones que tiran del hombre hacia adelante. La desolación, el abandono, la delgadez de la pena. Y dibuja unos joteros de ronda. Voces contra el silencio de la noche. Erguida la cuadrilla cuando todo descansa. Voluntad de desafiar a las sombras con un barullo de guitarras. También están erguidas las arquitecturas. Lahoz encaja en el folio unos templos estilizados que se levantan desde su pesantez de siglos y se estiran. Piedras espiritualizadas en virtud de la plumilla. Adustez y silencio.

Entra y sale Goya como Pedro por su casa. Escenas taurinas en las que son más fieros los hombres que las reses. La furia del toro que es la llama negra de la muerte. Pero más extraña aún es la furia del hombre que juega a afirmarse en la vida plantándole cara. Sueños de Quevedo. Fustigadores y llenos de seres malos. El terrible desencanto del Barroco, cuando, perdida ya la alegría ingenua y renacentista de la fe en el hombre y en el mundo, el hombre se refugia en la moralidad más cruel, como si regresara culpable y a palos a la Transcendencia medieval abandonada.