Arte con denominación de origen aragonés. El Palacio de Montemuzo acoge desde ayer Ilustratessen, una representativa muestra del arte moderno que se está desarrollando en Aragón, mediante la cual un total de 43 destacados artistas del diseño gráfico, la ilustración y el arte contemporáneo exhiben una de sus piezas.

El objetivo es claro: "Demostrar el talento que hay en Aragón", aseguró ayer con convencimiento en la inauguración Blanca Bk, que además de exponer, también ejerce como comisaria de la exposición. "Mucha gente conoce a grandes autores que están en esta exposición y, sin embargo, no sabe que son de aquí", reivindicó.

Ilustratessen ofrece una mirada panorámica a la creación con semilla aragonesa, poniendo el énfasis en los talentos que hoy en día viven y trabajan en España e incluso en el extranjero y cuyo origen no siempre es conocido por el gran público.

Eva Armisén, José Luis Cano, Luis Díez, Arturo Elena, Isidro Ferrer, Daniel García Nieto, David Guirao, Ana Lartitegui, Fernando Martín Godoy, Ignacio Ochoa, Álvaro Ortiz, Óscar Sanmartín y David Vela son algunos ejemplos de los ilustradores presentes en esta muestra y a los que les une sus raíces aragonesas, con la excepción de Ferrer, Lartitegui, Ramón Pisa, Diego Arribas y Beatriz Barbero-Gil, que nacieron fuera de la comunidad aunque mantienen estrechos vínculos con la misma.

En Ilustratessen la variedad de es una característica más. Personajes, espacios, figuras, objetos, etc. aparecen en las diferentes piezas exhibidas que han sido escogidas para la ocasión por cada uno de los autores.

SOLIDARIDAD El proyecto se concibe además en clave solidaria, puesto que los beneficios que reporte la venta de las ilustraciones originales irá destinado a la ONG Aucavi, dedicada a la ayuda de las personas que padecen autismo a través de proyectos que mejoran sus vidas en el ámbito social, familiar, educativo y laboral.

El conjunto de obras expuestas están recogidas en un catálogo en el que se informa sobre la técnica de las mismas. Además, la disposición de las obras sigue fielmente el orden que llevaban en el libro que conceptualmente precedió a la exposición y que puede ser adquirido por aquel que lo desee a un precio de 4 euros en el mismo Palacio de Montemuzo.