Aragón estará muy presente el próximo sábado en la XXXIV edición de los Goya. La zaragozana Isabel Peña repite en la categoría de mejor guion adaptado junto a Rodrigo Sorogoyen por la película ‘Madre’, Nata Moreno compite por llevarse el galardón al mejor documental con su trabajo sobre el violinista Ara Malikian (un film que la pasada semana ganó el Forqué) y el aragonés de adopción Gaizka Urresti es candidato en la misma categoría por ‘Aute retrato’. Además, Carla Pérez de Albéniz está nominada a la mejor dirección de producción por el nuevo largo de Amenábar ‘Mientras dure la guerra’. Este diario ha entrevistado a los cuatro candidatos. La película de animación ‘Buñuel en el laberinto de las tortugas’ y la técnico oscense Yasmina Praderas, que compite por el mejor sonido con ‘Quien a hierro mata’, también pondrán el sello aragonés a la gala.

-Puede convertirse en la primera aragonesa en ganar dos Goya. ¿Cómo afronta esto de los premios?

-Con mucha tranquilidad. Obviamente me hace ilusión; sobre todo que los compañeros académicos hayan nominado un trabajo como Madre, que es tan especial. Al final lo de los premios tiene la importancia que cada uno le quiera dar y yo le doy la justa.

-‘Madre’ es el cuarto film que escribe con Sorogoyen. ¿Tiene ganas de un proyecto en solitario?

-Trabajo con otra gente además de con Rodrigo, aunque él es mi favorito y siempre lo será. Casi toda nuestra carrera ha ido de la mano. Hemos crecido juntos y nos queda mucho por crecer y hacer. Tengo mucha suerte porque escribo con él y luego lo dirige muy bien. Sería muy tonta si le dejara escapar. Y lo de trabajar en solitario no lo veo. Me parece que es mucho más divertido y enriquecedor coescribir.

-¿Proyectos en cartera?

-Con Rodrigo hemos escrito la serie Antidisturbios, que se estrenará en Movistar+ en el 2020 o el 2021. Nuestro próximo gran proyecto ya está escrito y vamos a empezar con la preproducción. Y luego estoy con otro guionista y director escribiendo una peli pequeña.

-‘Madre’ se parece poco a lo que han hecho con anterioridad. ¿Tenían ganas de hacer algo distinto?

-Totalmente. De hecho, ese fue el motor de convertir el corto en largo. Cuando Rodrigo me lo propuso no sabía si me apetecía mucho otro thriller. Rápidamente me dijo que no quería que fuera un thriller, sino que quería hablar de ella, de la madre. Entonces todo encajó.

-Lo lógico y ‘fácil’ hubiera sido continuar en clave de ‘thriller’ al uso.

-Sí. La peli estaba clarísima tras ese inicio. Hubiera sido un film interesante, pero nos nos apetecía. Nos encanta el género, pero también nos gusta un cine muy dispar y lo que más nos interesa son los personajes; y el de Elena era muy apetecible.

-A algunos espectadores y críticos la película les ha generado cierto rechazo. ¿Era algo buscado que esa arriesgada incomodidad que se destila en el film despertara antipatía?

-No es buscado en absoluto, pero sabíamos que podía pasar. No hemos buscado polarizar porque tampoco sabemos cómo se hace. Pero cuando empezamos a trabajar fuimos conscientes de que en algunos momentos nos la estábamos jugando.

-¿Qué le parecen sus competidores en su categoría?

-He visto las tres pelis y las tres me parecen muy interesantes. Este año lo tenemos bastante crudo.

-Háblenos de sus referentes o de algún guion bordado.

Tengo muchísmos. Te diré tres pelis que creo que tienen un guion perfecto: 'Calle Mayor' (Juan Antonio Bardem), 'Azul' (Krzysztof Kieslowski) y 'Cría cuervos' (Carlos Saura).

-¿Las salas de cine peligran más que nunca?

-No podemos actuar como reaccionarios u oponernos a lo inevitable, aunque si las salas empiezan a entrar en coma sería una pérdida brutal e irremplazable.