El canónigo Jesús Lizalde se convirtió ayer en miembro de la Real Academia de San Luis, en un acto en el que la institución le reconoció sus treinta años de dedicación a la salvaguarda del patrimonio documental y musical de la diócesis de Jaca y en especial de la catedral de Jaca en la cual se celebró la entrega de la medalla, impuesta por el presidente de la Academia Domingo Buesa, que además es hijo adoptivo de Jaca por acuerdo del ayuntamiento de la ciudad.

El solemne acto contó con la asistencia del obispo, el alcalde y las autoridades de la ciudad. Ante una catedral totalmente llena, el profesor Buesa dedicó su discurso institucional a explicar el valor y la importancia de Jaca como ciudad real y primera capital de Aragón en el siglo XI.

Por su parte el nuevo académico, Jesús Lizalde, pronunció un discurso en el que explicó los fondos musicales y documentales de los archivos catedralicios, tema de un enorme interés y muy novedoso, refiriendo además cómo se organizaban la capilla de música y el clero catedral. El académico delegado en Jaca, Javier Ferrer, realizó la laudatio biográfica del organista Lizalde Gimenez, que concluyó la sesión con un concierto de órgano interpretando obras del siglo XIX, fecha en la que se construyó el órgano que acaba de ser restaurado.

RETRATOS

La tarde del viernes en el claustro del Museo Romanico de Jaca se celebró la inauguración de la exposición de retratos de los miembros del Grupo folclórico del Alto Aragón de Jaca que ha realizado la pintora y académica Esperanza Altuzarra, en homenaje a la labor que están desarrollando todos sus componentes y por la que la Real Academia le entregó un reconocimiento de mérito. Al terminar el acto y antes de visitar la exposición que estará dos meses en el claustro del museo de la catedral, el grupo Alto Aragón interpretó bailes de los Valles pirenaicos.