El músico e investigador Ángel Vergara tiene claro que «lo que no se conoce no se puede disfrutar». De ahí que este experto en el folclore aragonés dedique una buena parte de sus esfuerzos a la divulgación de las músicas de esta tierra, más allá de su interpretación. Así, con la intención y la necesidad «de hacer semillero» acaba de publicar con el objetivo de llegar a los más pequeños Qué buen sentir! Mosica e mosicos de por astí-Música y músicos de por ahí, que ilustrado por la también intérprete Mila Dolz, que ayer fue presentado en la Fnac de plaza de España de Zaragoza.

El libro, bilingüe en castellano y aragonés, y publicado por Rolde de Estudios Aragoneses y Aladrada Ediciones intenta acercar un poco a todos, pero sobre todo a los más jóvenes el amplio universo de las músicas de tradición popular en Aragón, a través de los ojos de unos chavales que ven la realidad con sorpresa y naturalidad. «El libro tiene varias partes, pero la central es como un diario en que unos chavales cuentan, con un lenguaje accesible, experiencias personales, como ir con la familia a determinadas fiestas, algo que todos hemos hecho; por ejemplo, la romería de Santa Orosia y cuentan con naturalidad que ven instrumentos raros, que unos les llaman de una manera y de otra forma, los bailes que ven… cosas que a ellos les causa curiosidad pero que ayuda a crearla también en el lector junto con las imágenes», cuenta Vergara.

En la obra, además de los textos y las imágenes, se ofrecen algunas grabaciones sonoras. Unas hechas a propósito para esta obra, otras tomadas del dominio público de las redes. «Es un libro de música y por tanto era normal que sonara -señala el autor-; antes era normal que los libro-discos tuviesen un cedé, pero hoy se ha quedado obsoleto y pensamos que a través de enlaces a la red con códigos QR podíamos colgar grabaciones hechas de propio y también incorporar enlaces a vídeos de dominio público donde se pueden ver en acción las interpretaciones de la música y los dances».

Además, también incluye enlaces al Sistema de Información de Patrimonio Cultural Aragonés (SIPCA), «una herramienta valiosísima para conocer la tradición oral y ayudar a divulgar este patrimonio pues habitualmente los canales de comunicación normales no se ocupan de este tipo de música», señala.

Vergara, que destaca como principal característica del folclore aragonés «su variedad, al salir de un territorio tan diverso geográfica y humanamente», recalca precisamente este aspecto al haber concebido el libro de forma bilingüe en aragonés y castellano. «Se trata de abrirnos a nuestro mundo más próximo; en Aragón hay varias lenguas patrimoniales y quien no lo conoce no llega a comprenderlo. Si viajas a Benasque o a Gistaín ves que hablan de esa manera y cada uno distinto. Puede resultar extraño, por eso lo mejor es conocer para entender», concluye el músico.