"El mal siempre está. Somos la parte mala de los primates". Lorenzo Silva ganador del Premio Primavera de Novela 2004 con Carta blanca (Espasa Narrativa), matizó ayer en Zaragoza el pesimismo determinista de las guerras enlazadas de las que no parece sustraerse el ser humano. Afirmó que construye "un optimismo desesperado". Y dijo: "Cuando no parece que pueda esperarse nada, se sale adelante con el arma más poderosa: el no tener nada que perder".

Silva presentó ayer en Zaragoza su obra en Ambito Cultural de El Corte Inglés, acompañado de Eugenia Rico, autora de La edad secreta que fue la finalista. Y entre los dos escritores surgió un diálogo sobre la lucha del hombre frente a su propio destino, los temas recurrentes del amor y la muerte que atraviesan la literatura universal, y la reflexión sobre el paso del tiempo.

Ganador del Premio Nadal 2000 por El alquimista impaciente , Lorenzo Silva parte en esta nueva novela de una guerra de Marruecos hace 80 años que "alteró la historia de España del siglo XX: le costó la corona a un rey; creó una casta de militares que acabó con la república y forjó gran parte del descontento popular que radicalizó a las masas hasta el punto de que hicieron caer la República casi tanto como los militares sublevados". Y como hilo conductor entre las escaramuzas del Rif y la Guerra Civil, el protagonista; Juan Faura, un héroe que se enfrenta a su destino hasta doblegarlo y someterlo a las propias creencias y a las propias decisiones.

SOBREVIVIR A LA GUERRA

Lorenzo Silva citaba ayer a un periodista norteamericano que ha escrito: "Va a tener más influencia Irak en los Estados Unidos, que éstos en Irak. Porque en en este país van a seguir sunitas y chiíes y llevándose bien o mal. Y sin embargo, cientos de miles de jóvenes americanos van a tener que regresar de esa guerra, e incorporarse a nuestra sociedad, que no será la misma tras vivir lo que han vivido".

Eugenia Rico, por su parte, señaló que en su novela La Edad secreta es una historia sobre el placer, sobre el deseo y sobre el sentido de la vida: "Tratan de aterrorizarnos. Dicen las encuestas que lo que más nos preocupa es el terrorismo. Nos quieren dejar el miedo porque es muy cómodo. En mi novela se rebelan contra ese miedo".

Narra la historia de una mujer que un día coge el coche y se va. Deja atrás el matrimonio y la vida acomodada. Las gasolineras serán desde entonces como su casa. En una de ellas se encuentra con un joven enigmático que tiene 20 años menos que ella. Y comienzan juntos una serie de aventuras en las que romperán todos los tabús".

"Es la historia de una resurrección, --declaró Eugenia Rico--, la segunda oportunidad. Cuando crees que no te va a pasar nada más y te queda la edad secreta, que son los años que te quedan por vivir". Hay una prórroga en la vida de cada persona que no se sabe cuánto puede dudar. La autora admitió abiertamente que su obra es "una novela contra el determinismo, la ilusión de la libertad, como si hubiera un futuro aún no escrito, la posibilidad de que nos inventemos otro destino" Y concluyó: "La edad secreta es la vida. ".