Llevan 23 años sobre el escenario y están dispuestos a continuar su carrera durante muchos más. Elefantes ha retomado la gira de su último álbum tras suspenderla este año por el cáncer que sufrió su batería, Jordi Ramiro, y ahora, tras una recuperación «récord», tienen un calendario completo: «Esos conciertos aplazados son ahora una fiesta de la vida».

Este sábado, a las 22 horas, actúan en el Teatro de las Esquinas de Zaragoza, una ciudad talismán para ellos, pues allí conocieron a Enrique Bunbury, el responsable, aseguran, de su triunfo. «Él nos abrió las puertas a este mundo», comenta Shuarma, el cantante del grupo barcelonés, en una entrevista telefónica con Efe, en la que recuerda ese primer concierto que dieron en la capital aragonesa, en la sala Morrisey, ante tan sólo diez personas.

«Entre ellas estaba Bunbury y él nos propuso producirnos un disco y nos llevó de gira por México, Estados Unidos y España; todo eso cambió nuestra carrera porque a partir de ahí nos dimos a conocer», rememora.

Desde entonces han pasado más de veinte años y Elefantes sigue sobre el escenario presentando, en esta ocasión, su último disco, La primera luz del día, en una gira que se tuvo que suspender a principio de año por un cáncer y que ahora retoma con mucha ilusión. «Somos de los afortunados que hemos pasado esta enfermedad con éxito y en poco tiempo. Todos esos conciertos que hemos tenido que aplazar se han convertidos ahora en una fiesta y en una celebración de la vida», manifiesta.

Así que todo apunta a que habrá Elefantes para rato. Aunque Shuarma no es partidario de pronosticar el futuro, pues nunca sabes lo que pueda pasar, explica que ahora mismo se sienten «muy fuertes» tras vivir una experiencia que ha reafirmado su voluntad de querer continuar juntos muchos años más.

Además, están en un momento dulce de su carrera. Sienten que sus canciones son ahora mejor comprendidas y que sus temas están llegando a más gente, algo en lo que ha tenido mucho que ver su último disco, que ha dado un «empujón» más a su carrera.

«Es una sensación muy bonita sentir que somos un grupo que está vivo; que va creciendo y que no estamos anclados. Nos sentimos muy escuchados y muy queridos», expresa el cantante.

Pero además de esta gira, que les llevará por los festivales de verano de distintos puntos de España, Elefantes se ha embarcado también en un proyecto solidario con Intermon Oxfam. Con la colaboración de Manolo García y el poeta Benjamín Prado, han lanzado su primera canción solidaria, Agua, para apoyar una campaña que busca llevar agua potable a zonas del Cuerno de África.

Shuarma, quien colabora desde hace años con esta oenegé, decidió dar difusión a esta iniciativa con una canción que se ha publicado esta semana en las plataformas digitales y cuya recaudación irá destinada a este fin. «Queríamos que quienes que la escuchen se den cuenta de la suerte que tienen de tener agua y que hay otros en el mundo que no tienen esa suerte, y que con poquito que hagamos desde aquí allí se recibe como mucho», señala.

Como el objetivo era dar difusión a la campaña, no dudó en contar con una de las «mejores voces», Manolo García, y la aportación de su «buen amigo» Benjamín Prado para enriquecer la letra. «Entre todos creo que hemos hecho una cosa muy bonita», puntualiza.

Es probable que Elefantes toque este tema hoy en Zaragoza. En cualquier caso, tanto si lo hacen como no, lo que sí es seguro, en palabras de Shuarma, es que este concierto será «una auténtica fiesta».