La Love Parade, la más multitudinaria fiesta tecno del mundo y una de las señas de identidad del nuevo Berlín , ha sido definitivamente cancelado para este año, por falta de patrocinadores y apoyo público a los costes que genera.

Por primera vez desde 1989, la capital alemana no vibrará con la caravana que en 1999 había alcanzado la cifra récord de un millón y medio de ravers o fanáticos de la música electrónica, pero que en 2002 entró en una fase de capa caída.

Tras un mes de negociaciones con el Senado berlinés, Gobierno regional de la ciudad-estado, los representantes de la Love Parade GmbH anunciaron hoy su decisión definitiva de cancelar el desfile de este año, que debería haberse celebrado el 10 de julio.

Pese a una última oferta de ayuda del Senado, a los organizadores seguían faltándoles unos 500.000 euros (594.000 dólares) para asegurarse la financiación.

Berlín pierde con ello uno de sus imanes turísticos , que atraía a la capital germana a jóvenes de todo el mundo dispuestos a lanzarse al compás del tecno.

A lo largo de una jornada, tradicionalmente el segundo sábado de julio, una caravana de camiones de los principales clubes de la ciudad, equipados con poderosa megafonía y con la actuación de pinchadiscos estrella, cubría los siete kilómetros de recorrido en la avenida 17 de Junio, una de las arterias que cruzan la ciudad.

La Love Parade nació hace quince años a iniciativa de un pinchadiscos llamado Dr. Motte -Doctor Polilla , en alemán-, con apenas 150 fanáticos de la música tecno desfilando detrás de una furgoneta. En los años siguientes creció hasta convertirse en la más multitudinaria fiesta de música electrónica del mundo y consolidarse como seña de identidad del nuevo Berlín, reunificado tras la caída en 1989 del muro que dividía la ciudad.

Desde 2001, y de resultas de una sentencia del Tribunal Constitucional, dejó de ser considerado una manifestación política para pasar a la categoría de acto comercial, con lo que la ciudad de Berlín limitó su participación en los costes que genera.