Un trocito del barrio de la Magdalena, concretamente la calle Mayor de Zaragoza, se ha convertido en lanas de colores y entrado en el Centro de Historias hasta el 16 de noviembre en forma de exposición.

Esta muestra, denominada La ciudad tejida, está realizada por la asociación Urban Knitting Zaragoza, compuesta por 29 mujeres y un hombre. Consiste en mostrar una reproducción de la calle Mayor con el bar Entalto como "punto de encuentro" y la tienda de juguetes y de dulces Quitería Martín como protagonista. Estos están acompañados por elementos que podemos encontrar en cualquier calle de la ciudad como un árbol, un grafiti, una bicicleta y un señor sentado en un banco. "Hemos intentado que todos los detalles se acerquen lo más posible a la realidad", reconoció Montse Palacián, miembro de Urban Knitting Zaragoza. Todo ello está sujeto a unos bastidores que han sido instalados por las brigadas municipales y está realizado con 1.000 ovillos de lanas multicolores mediante la técnica del ganchillo y del amigurumi. La muestra ha supuesto ocho meses de trabajo para los componentes del colectivo zaragozano.

Desde el Centro de Historias, la exposición, que tiene un presupuesto de unos 7.000 euros, "es una manera de dar a conocer lo que es desconocido para una gran parte de la población", declaró Jerónimo Blasco, consejero de cultura, ayer en la inauguración.

DESDE 2011

Este grupo de arte urbano nació en Zaragoza en 2011 con el objetivo de reivindicar el tejido. Desde entonces han realizado multitud de intervenciones artísticas por las calles de Zaragoza, como la fuente de la Hispanidad, los cañones de Glorieta Sasera o el caballo de la Lonja entre otros, y han impartido cursos sobre las técnicas de tejido. Para ellos, este trabajo con la lana, reconocido como una corriente de arte urbano, no lo consideran un trabajo. "Esperamos que lo que hacemos por diversión pase a ser diversión para los demás", explicó Montse Palacián.

La exposición estará abierta al público de forma gratuita hasta el próximo 16 de noviembre. Tras su retirada del Centro de Historias, según contó Palacián, "las lanas se reutilizarán y se entregarán a diferentes asociaciones locales en forma de mantas o como las necesiten en ese momento".