TITULO: Huesca Imagen

LUGAR: Diputación de Huesca, Centro Cultural El Matadero, Museo de Huesca y salas de la UNED en Barbastro

FECHA: Hasta el 1 de agosto

A lo largo del mes de julio, el Festival Huesca Imagen presenta en las distintas salas de exposiciones de la ciudad de Huesca y en las de la UNED de Barbastro el apartado contemporáneo de la imagen realizada en México, país invitado de esta décima edición que arrancó en mayo con una visión de la fotografía histórica y siguió con una retrospectiva de Gabriel Figueroa.

La cita anual de este certamen llega a su fin con un importante repertorio de imágenes realizadas por algunos de los más destacados artistas mexicanos como son Gerardo Suter, Alfredo de Stéfano o Gerardo Montiel. Por supuesto, no podríamos olvidarnos del maestro Carlos Jurado, cuya obra se presenta por vez primera en España.

A todos ellos se unen otros autores como Diego Pérez, Dante Busquets, Mauricio Alejo, Ivonne Venegas, Miguel Calderón, Héctor Falcón, Benjamín Alcántara, Xavier Rodríguez y Daniela Rosell, cuyas obras conforman la muestra colectiva Cotidianidad documentada, que ocupa la sala del Museo de Huesca, donde también se presenta el proyecto Pinche Malinche o 7 historias de amor videográfico. Desde el Museo puede dar comienzo el itinerario que el Festival nos propone.

CARLOS JURADO

La obra de Carlos Jurado (Chiapas, 1927) ocupa una de las salas del Centro Cultural El Matadero del Ayuntamiento de Huesca. Discípulo de Diego Rivera en la Academia de Bellas Artes de La Esmeralda, imparte clases en la Universidad Pública de Morelos. La experiencia de su compromiso social y político es sin duda lo que singulariza su peculiar modo de entender y captar la imagen a través del desarrollo de la técnica estenopeica o juradotipia, consistente en tomar imágenes con una sencilla caja de cartón sin lentes.

En la segunda sala de este centro municipal, Gerardo Suter (1957) reserva al espectador una de las mejores sorpresas del Festival. Como en él es habitual, el espacio ha sido convertido en escenario privilegiado donde va a acontecer la reflexión a partir de un discurso visual de extraordinaria intensidad. Fragmentos de su cuerpo establecen en estas imágenes la visibilidad de una cartografía anclada en la permanencia de lo invisible.

El ensueño mágico y revelador de las imágenes de Jurado y Suter nos acompañan hasta la sala de la Diputación de Huesca, institución organizadora del festival. Allí, Alfredo de Stéfano (Monclava, 1961) presenta con el título de Habitar el vacío una amplísima secuencia fotográfica y dos programas de vídeo que documentan sus intervenciones efímeras en los desiertos de Coahuila y de la Baja California, en la frontera con los Estados Unidos.

La amplitud espacial del paisaje del desierto, la densidad de un silencio atronador y la dureza de la luz que lo inunda son cuestiones que por supuesto interesan al artista, aunque su principal atención parece dirigirse a la capacidad del espacio para convertirse en receptáculo simbólico del devenir universal. En sus intervenciones en el desierto, la mayoría de carácter escultórico, Stéfano reclama un orden que abarque en su ritmo el binomio tiempo-espacio.

Ya en Barbastro, las salas de la UNED presentan el proyecto videográfico tan irregular como prescindible, Mexican Pop Vídeos, que según el programa tiene su punto de partida en la reinterpretación de la cultura popular mexicana en el ámbito del videoarte.

De todos modos, el viaje a Barbastro se impone para conocer el trabajo de Gerardo Montiel (México D. F., 1968). Para su presentación, se han seleccionado fotografías pertenecientes a tres series: Cicuta, Desierto y Ex Tenebris Lux. En todas ellas, la dicotomía bien-mal señala el inicio de su proyecto estético. Montiel ilumina la presencia del mal para así poder reconocerlo. Los cuerpos de las víctimas son el index de sus fotografías y así mismo la huella de la permanencia del mal.