-En el corazón de la lluvia ganó el premio Logroño de Narrativa. ¿Que supone el aval de un premio como este?

-El aval de un premio; y yo ya tengo la experiencia por el Torrente Ballester con respecto a otras novelas que no han tenido premio, es una promoción más fácil, una visibilización del libro no tan complicada por la masiva afluencia de títulos que sale cada temporada al mercado.

-Se trata de una novela coral, con una gran protagonista, Laura. ¿Cómo la definiría?

-Yo definiría a Laura como una mujer de nuestro tiempo que vive en la época actual, que tiene los problemas que tanto nos suenan al resto de las personas, de precariedad laboral, de vida de locos que se lleva en las ciudades, de trabajos que nos exprimen al máximo, y en el fondo, una falta de tiempo para tener un ocio y una vida emocional y sentimental y para vivir de una manera que satisfaga mínimamente.

-No sé si está de acuerdo, pero es una mujer de su tiempo que tiene una dependencia de los hombres brutal.

-Yo creo que Laura es una mujer enamoradiza, que tiene múltiples relaciones, que aunque parezca que no son definitivas, dejan una huella. Y es que el amor si algo tiene es la capacidad de conmocionar, nos afecta aunque queramos aparentar que son superficiales.

-¿Cree en la crisis de los 40? Laura la sufre.

-Yo no sé si llamarle crisis, que probablemente lo sea, o (duda) hablar directamente de esa etapa de la vida que es el meridiano, se han vivido 40 años, una edad razonable de edad son de los 80 a los 85, por lo que queda otra midad por vivir y esa mitad da el aliciente y la lucidez de decir ahora decido cómo vivir o se me va a pasar la vida sin haber tenido la oportunidad de vivir como yo quiero.

-No se si le gusta ponerle etiquetas a la novela... diría que es de sentimientos, misterio, aventuras, intriga…

-Yo resumiría diciendo que cuando escribo una novela me gusta que sea una novela lúdica en la que el lector se reconoce y es una novela que tiene una parte de misterio, atmósfera de novela negra, también novela de amor, de aventuras, en definitiva, una novela que de principo a fin trata de contar la vida y de reflejar el mundo entero... más que el mundo, la vida entera.

-¿Por qué Galicia?

-El paraje perdido o la lluvia son escenarios fáciles de encontrar en la Galicia rural. Quería ubicar el paraíso al que llega la protagonista en una naturaleza esplendorosa. La lluvia como una cierta hostilidad, una melancolía de fondo que permitía a Laura, por constraste, sumergirse en un mundo que no era el suyo, en el que se tenía que adaptar como fuera.

-Utiliza la primera persona al narrar.

-Porque apela directamente al lector, se habla con el corazón y con la cabeza, mientras que si se usa una tercera ya tamizas lo que está pasando, hay un filtro.

-La actualidad está muy presente en la novela.

-El presente yo pienso que es lo mejor que nos ha pasado y también lo peor. Todo lo que pasa en las páginas de la novela está pasando en la actualidad. El cambio de paradigma de la sociedad actual que estamos en transición hacia un mundo supertecnificado, el contraste, las concentraciones en las ciudades y la pérdida de habitantes del pueblo y es en esa vida esencial, más sencilla, es mucho más fácil encontrar el equilibrio, la paz interior, el sentirse vivo.

-Entre la ciudad y la vida rural, apuesta por la rural, pese a los problemas a los que se enfrenta Laura.

-Sí, como contraste, porque viene de una locura urbana de vida en una ciudad enorme. Eso ya lo conoce, no lo quiere, le apetece la experiencia del campo una vez que se lo encuentra, porque el azar tiene mucho que ver con la realidad que vive. Porque ya no puede conducir más tiempo, se para en un sitio y allí se encuentra la vida que estaba buscando...

-Participa en libros colectivos de Los hijos de Mary Shelley. ¿Qué le aporta el personaje?

-De Mary Shelley, la parte tenebrosa de ese personaje que sale de la imaginación de una mujer y que ha conmocionado a las distintas generaciones que se han sucedido y que encuentran en esa creación (Frankenstein) esa parte oscura que todos llevamos dentro.

-También incluye en El corazón de la lluvia esa oscuridad de la que habla.

-Sí sí, porque como decía Chesterton: «Asómate a la valla del jardín y verás lo que es una tragedia». Las personas no son siempre buenas o malas, todos tenemos un doble fondo, que mantenemos oculto como la parte del iceberg y que es un material novelable de primera.