Poner el acento en «las maneras de contar y en el mensaje para ir a la esencia del teatro». Con ese objetivo nació hace ya cuatro año el ciclo de Teatro Rebelde en el Teatro de las Esquinas en lo que fue una apuesta personal de los programadores del espacio: «En primavera hacemos el ciclo de Mujeres a escena y en mayo el de Teatro Rebelde. Son dos programaciones muy concretas que sabíamos que iba a costar consolidar pero que tenemos muy claro que deben ser una esencia de las Esquinas». La que habla es la responsable de programación del Teatro de las Esquinas, Raquel Anadón quien junto a Alfonso Plou es la que ha conformado este ciclo de Teatro Rebelde (la edición de mayo del año pasado se tuvo que cancelar por razones obvias y por eso se celebra en febrero de este 2021).

«El teatro -explica con contundencia Raquel Anadón- tiene que servir para eso, para trasladar un mensaje y que este llegue de manera directa al espectador y aquí presentamos cinco propuestas de teatro social, poético, con maneras de contar diferentes y con un acento especial en el ser humano».

La cita se abre este miércoles (es el día de la semana en la que se ofertarán estos espectáculos durante las próximas cinco semanas) con la puesta en escena de Flamenco para recordar. Coplas de un recuerdo. Después, sucesivamente, el público zaragozano podrá disfrutar con Memoria (10 de febrero), Shakespeare en Berlín (17 de febrero), La isla (24 de febrero) y El fuego amigo (3 de marzo).

Todo surge, confiesa Anadón, de su propia actividad como compañías de teatro: «Vamos a muchas salas y a ferias y vemos muchos espectáculos que nos conmueven y son los que realmente nos apetece traer a nuestro teatro». Eso también hace que el Teatro de las Esquinas se posiciones como una de las salas en la que tienen cabida espectáculos que en otras «como el Principal no tienen cabida porque hablamos de un formato pequeño y media, teatro contemporáneo y cercano que se ve mucho en lugares como Madrid, Barcelona y Bilbao pero que aquí en Zaragoza no es tan fácil si no es aquí o en el Teatro de la Estación y Arbolé con Les refusés».

Esta edición que arranca el miércoles de Teatro Rebelde será ya la cuarta y, a pesar de que se tuvo que posponer de mayo a febrero, ya es una propuesta que está consolidada, reflexiona la programadora: «Empezó con muy poco público pero, ahora, juntamos a 200 personas cada miércoles y eso es mucho para ser un día de la semana como ese y teniendo en cuenta que no son espectáculos mayoritarios sino más reflexivos que invitan a mirarse a uno mismo pero están alejados de la etiqueta comercial». Para llegar a este punto, Raquel Anadón tiene claro que ha sido muy importante la persistencia: «Las cosas cuestan mucho que arraiguen, mover al público un miércoles es difícil pero romperlo cuesta muy poco, por eso tenemos claro que es mejor resistir que cerrara, el público nos tiene que tener como referencia, si no estamos muertos».

Con respecto a la oferta que se va a poder ver los próximos cinco miércoles, Raquel Anadón también lanza sus preferencias aunque deja claro que todas las obras merecen mucho la pena: «La isla cuenta con un nivel actoral de lujo y El fuego amigo es muy conmovedora y nos recuerda el asesinato de Couso y lo que ha pasado en otras guerras que ni nos acordamos», concluye.

Las entradas para cada una de las obras de teatro ya están a la venta en la web del teatro donde también se puede adquirir un bono que permite el acceso a todas las producción por un precio de 30 euros.