Michael Moore volvió a descargar toda su artillería contra George W. Bush, la prensa estadounidense y los demócratas. En su único encuentro con los medios extranjeros, el martes en Nueva York, el director de Fahrenheit 9/11 imitó al inquilino de la Casa Blanca, criticó a la oposición, defendió su documental, animó a los cineastas de todo el mundo a "coger una cámara y reflejar la verdad" y pidió a los periodistas que hagan preguntas incisivas para "destapar las mentiras de sus gobiernos".

Moore anticipó su próximo proyecto: mostrar el impacto que la política y las empresas estadounidenses tienen en el resto del mundo. "Quiero enseñar todo lo que hacen en nuestro nombre". El cineasta afirmó que el mejor ejemplo a seguir es el de los españoles, "que se opusieron a la guerra y castigaron a su presidente en las urnas. Cuando vean la película en España (se estrena el 23 de julio), se sentirán orgullosos y pensarán: ´Lo sabíamos, hicimos nuestro trabajo, Mike´".

Moore se excusó por haber suspendido su gira de promoción internacional. "Tenemos elecciones y cada día fuera del país nos aleja de nuestra misión, que es echar a Bush de la Casa Blanca. En eso voy a concentrar todos mis esfuerzos hasta el 2 de noviembre". La voz disidente más escuchada en Estados Unidos quiere que el resto del planeta se entere de que no está solo en esta lucha. "Yo soy parte de la mayoría que no votó por este hombre. Necesito que lo escuchen en otros países, donde creen que los americanos somos simples y gritones".

LOS MISILES DE CUBA

Según Moore, la primera pregunta que se hacen sus compatriotas después de ver Fahrenheit 9/11 es por qué no vieron esas imágenes en los informativos de la televisión, como la escena de Bush sentado en un colegio, inmóvil, cuando su asistente le informa de los ataques terroristas, que fue filmada por un profesor. "Una de las lecciones que los espectadores sacan de mi película es que la prensa americana se convirtió en cheerleader de Bush en esta guerra y le hizo un flaco favor al pueblo. Lo mejor de vivir en una sociedad libre --agregó--es que puedes preguntar lo que quieras. Por ejemplo, ¿dónde están las armas de destrucción masiva? Cuando era niño recuerdo a Kennedy mostrando fotos de los misiles de Cuba".

Los medios de comunicación estadounidenses son, a juicio de Moore, en parte responsables de la muerte de los soldados. El director se preguntó por qué ninguna cadena grabó el viaje de los talibanes a Texas, cuando Bush era gobernador. "Sólo la BBC estaba allí".

De entre todas las imágenes de Fahrenheit 9/11 , Michael Moore dijo que su preferida es la que muestra a la madre de un soldado muerto, en el salón de su casa."Ahí decidí que tenía que hacer lo posible para que este documental llegara a todo el mundo". Y agregó: "Estoy orgulloso de ser americano, y el 2 de noviembre día de las elecciones vamos a demostrar por qué".