El escultor Manuel Cusachs, autor de obras para el monasterio de Montserrat o la Sagrada Familia falleció ayer a los 85 años. Considerado uno de los grandes escultores del país, su estilo fue heredero del expresionismo y la figuración lírica de los años 1930 y 1940, y el retrato y la figura humana fueron lo más habitual de su creación.