Villanoir vivió ayer su jornada central, que tuvo como protagonistas tres mesas redondas. En la primera, Javier Marquina y Cristina Hombrados hablaron sobre el cómic y destacaron que la clave para que un cómic funcione reside en «fundir en un elemento todos los aspectos, todo está inventado y lo imporante es cómo se cuenten las cosas, ahí reside la clave».
De la misma opinión son Jon Arretxe, Estela Chocarro, Rafa Melero y Jerónimo Tristante, que trataron sobre Novela negra urbaja y rural. Este último señaló también que «los escritores de género negro sobrevivimos porque estamos en constante cambio, de ubicaciones, de personajes... y ahí reside el secreto de que este género siga vivo». Los cuatro coincidieron también en que no solo es el ambiente del pueblo lo cambia todo, si no también la ubicación, la naturaleza... «La principal diferencia es que en un pueblo sale más a flote la condición humana», señaló Chorcarro.
José Luis Muñoz, Empar Fernández y Marcelo Luján analizaron la actualidad del género y su evolución. «Lo negro no es un género, es una forma de mirar la realidad y abordarla», dijo Muñoz.
Villanoir concluye hoy en Villanúa con una jornada dedicada a la familia, con la actividad Quién mató al capitán Wagner, cuenteacuentos de Los caralibros y la proyección de Atraco perfecto.
