Desde que empezó la crisis sanitaria por la expansión del coronavirus, el sector de las artes escénicas ha sido uno de los más afectados. Cristina Yáñez, directora del Teatro de la Estación explica cómo está afectando al sector de las artes escénicas el estado de alarma por la crisis sanitaria del coronavirus: «Está siendo bastante catastrófico. El nuestro era un sector ya muy golpeado por la crisis económica anterior. Vivimos al día y ahora vemos como se ha paralizado todo: los teatros están cerrados, no se puede ensayar y se caen las funciones que vienen después. Eso nos va a afectar para mucho después, pero los artistas somos personas optimistas y resistentes».

En este sentido, Yáñez destaca cómo está repercutiendo en especial esta situación al Teatro de la Estación: «Teníamos muchas actividades que hemos tenido que suspender. Además tenemos la escuela de teatro, los profesores están dando clase desde casa y en cuanto se pueda se recuperarán, no sabemos lo que va a durar todo esto».

Además de haberse cancelado las actividades por el estado de alarma, la compañía cuenta con la dificultad añadida de contar con proyectos propios que han tenido que posponer: «Nuestro programa estrella llevaba más de veinte años de actividad dirigida a los jóvenes, se ha suspendido por completo y eso ya lo hemos perdido. Además, la compañía este año había iniciado un programa de una producción internacional que empezamos a trabajar en residencias en Francia y España. Íbamos a empezar el sábado pasado la última fase del proyecto, y a estrenar nuestro nuevo espectáculo después de San Jorge, pero como no nos podemos juntar no podemos ensayar», expresa Yáñez.

En este sentido, la directora del teatro incide en la dificultad de trabajar en un proyecto internacional con Francia. «Cuando todavía no se había declarado el Estado de alarma tuvimos que hablar con la compañía francesa y con la madrileña. En el caso de Madrid ya había llegado a afectar a un gran número de personas, pero en Francia todavía no eran muy conscientes. Pocos días después se puso el estado de alarma, nosotros no quedamos en nuestras casas y los propios franceses tampoco pudieron moverse. Sí que es algo que lo dificulta, estamos expensas de lo que digas las autoridades sobre los teatros».

Sin embargo, Yáñez se muestra optimista respecto al tema y valora la vuelta a los escenarios de las compañías cuando la situación se revierta: «La vuelta va a depender también de la situación en Francia y de cómo están gestionando el tema. Mi idea es que en cuanto nos podamos volver a juntar, ensayar a tope y estrenar. Aunque no sean las doce funciones queremos estrenar para poder afrontar todo lo que viene después. Nuestra idea es no parar nada, pero mi mayor duda es si se van a abrir los teatros, puesto que el drama es una actividad social muy proclive a las infecciones al ser algo muy social».

Así, la directora del Teatro de la Estación comenta cuáles iban a ser los próximos pasos que iba a seguir la compañía una vez que finalizase el estado de alarma: «Los actores franceses se encuentran ahora mismo confinados en sus casas, y nosotros también, pero en cuanto acabe todo retomasemos nuestra actividad. Luego tenemos preparada toda una gira desde septiembre por Portugal, Italia, España y Francia, y espero poder estrenar antes o después».

Por último, la directora del teatro habla sobre este proyecto que estaban preparando y sobre lo que más le gustaba de este: «Es un proyecto que llevamos cultivando desde principios de 2019. Los ensayos fueron una parte muy bonita porque era el momento en el que probábamos las escenas que los escritores habían redactado previamente. Era un proceso muy bonito le íbamos dar y el toque final. Por otro lado, se trata de la representación de escenas a partir de un hecho que ocurrió en el Pirineo, sobre las fronteras, la gente, la humanización de Europa. Es, en definitiva, una reflexión y por otro lado lo que nos está ocurriendo nos va a obligar a adaptar algunas cosas», concluye.