Viggo Mortensen, que ha alcanzado la fama gracias a su papel de Aragorn en la trilogía de El Señor de los Anillos , presentó ayer en Madrid su nueva película, Océanos de fuego (Hidalgo) , un filme dirigido por Joe Johnston que llegará a las salas comerciales españolas este viernes. En una concurrida rueda de prensa, el actor neoyorquino, que pasó parte de su infancia en Venezuela y Argentina, habló en un perfecto español de la trilogía de Peter Jackson, de la cinta en la que comparte protagonismo con Omar Sharif y de su participación en El capitán Alatriste .

"Que me perdonen los españoles por interpretar al capitán Alatriste, un personaje lindo que vivió una época linda para España y para el mundo, ya que lo que ocurrió entonces me está haciendo pensar en lo que ocurre hoy; aunque apenas he empezado a investigar", afirmó Mortensen, quien protagonizará, junto al mexicano Gael García Bernal, la versión cinematográfica de la obra de Arturo Pérez Reverte, que llevará a la gran pantalla Agustín Díaz Yanes.

En este sentido, el protagonista de filmes como Retrato de una dama , Extraño vínculo de sangre , Atrapado por su pasado , Marea roja , Un crimen perfecto o La pistola de mi hermano indicó que, "a veces, es más fácil pensar en lo que nos pasa en la vida cotidiana y en nuestro país, cuando lo puedes comparar al ver una fantasía, ya que te das cuenta de las cosas que no están en los periódicos".

"Espero aprender más investigando sobre el personaje del capitán Alatriste y aprender a hablar como en la época", prosiguió Mortensen, quien reconoció que le gustaría pasar más tiempo en Madrid para ver más tiempo a sus amigos --entre los que se encuentra el escritor y director Ray Loriga-- y poder ver el partido de mañana entre el Real Madrid y el Bayern de Munich. "Soy del San Lorenzo (Argentina), pero cuando estoy en España, soy madridista, aunque no tanto como Ray Loriga, dijo.

Sobre el triunfo de El Señor de los Anillos en la pasada edición de los Oscar, donde la cinta de Jackson se hizo con 11 estatuillas, Mortensen fue muy claro: "Es una linda despedida y una linda forma de reconocer el trabajo de Peter y su familia, que ha estado metido en este proyecto durante ocho años. Los 11 Oscar no son sólo para los que tienen la estatuilla, sino para todo el equipo y para Nueva Zelanda, donde se rodó la trilogía", manifestó.

Asimismo, quiso dejar claro que, aunque no hubiesen ganado tantos Oscars, seguiría diciendo que todo el equipo hizo "un buen esfuerzo".