Juego de tronos dijo adiós a sus seguidores este domingo con un final que ha dividido a la audiencia, pero continúa viva en HBO. Y no solo porque la cadena emita el próximo lunes el documental centrado en el rodaje de la serie que ha marcado la última década en televisión, sino porque ya ha comenzado el rodaje de su primer spin-off o ficción sucesora.

La noticia ha sido adelantada por el blog especializado Watchers on the Wall y el tabloide británico The Sun, que también avanza cuál será el título de esta producción: Bloodmoon (Luna de sangre).

Con Naomi Watts como protagonista, esta precuela de Juego de tronos se ambienta 5.000 años antes de su predecesora y está centrada el origen de los Caminantes blancos, creados por los Hijos del Bosque con la intención de protegerse de los hombres.

El rodaje se habría adelantado así a los planes iniciales, ya que la HBO habló en un primer momento que las grabaciones comenzarían este verano.

Tal y como ocurrió con Juego de tronos, la sede principal del rodaje de la serie sería Irlanda del Norte, en este caso el parque natural de Glenariff, en Belfast, cerca de Cushendall. La idea es que la grabación también discurra meses después en Canarias.

DOS NUEVAS SERIES

Glenariff también fue uno de los escenarios de rodaje de la serie que ahora acaba de concluir, concretamente representando el Valle de Arryn.

Aparte de Bloodmoon, The Sun habla también del rodaje de otras dos series centradas en el universo de Juego de tronos, creado por el escritor George R. R. Martin con su saga Canción de hielo. R. R. Martin, además, ha desmentido que los últimos dos libros lleven años escritos y ha arremetido contra los bulos que circulan en internet sobre el asunto.