Zavijava Films acaba de dar el salto para instalarse en la comarca del Bajo Aragón. Se trata de una productora audiovisual promovida por el director de cine y guionista Miguel Santesmases y la productora María de Juan, que ha instalado su sede social, desde el pasado 1 de febrero, en Belmonte de San José.

Zavijava Films se propone «producir cine, tanto de ficción como documental, así como experiencias narrativas en realidad virtual, además de promover eventos en estos medios, para contribuir a convertir a esta comarca en un espacio de referencia en el sector», aseguran desde la productora ya que, dicen, estar «convencidos de que, planteándolas con rigor financiero y como una apuesta firme por ir en busca de su público, hay un mercado para este tipo de producciones».

Entre los proyectos iniciales de la productora en los que ya está trabajando destaca el largometraje de ficción Tierra Baja. Se trata de un drama romántico adulto sobre la importancia de la memoria y la amenaza del olvido para el que Aitana Sánchez-Gijón ha confirmado su interés en interpretar a la protagonista. La actriz, si finalmente llega a buen puerto el proyecto, dará vida a Carmen, una escritora en crisis que se ha refugiado en esta tierra, en una masía que era de su abuela, que recibe la visita de un productor de cine que quiere llevarla de vuelta a Madrid.

Tierra Baja, que dirigirá Miguel Santesmases y cuyo guion está escrito por Ángeles Gonzáles-Sinde y por él mismo, se encuentra en fase de desarrollo y financiación. Cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Alcañiz y el Ayuntamiento de Belmonte de San José, lugares previstos para su rodaje en verano de 2022.

Invitado por el Curso de Humanidades en 2019, donde presentó su cortometraje El porvenir de mi pueblo, sobre Juan Pío Membrado, un antepasado suyo, Miguel Santesmases ya tuvo entonces ocasión de explicar allí sus planes, y posteriormente en un artículo que sobre este asunto publicó en Compromiso y Cultura.

En palabras del escritor y periodista Ramón Mur, «Santesmases, con vínculos familiares en el Bajo Aragón, lleva años captando el paisaje y el medio en que se mueven los habitantes de una zona de España y Aragón en claro declive poblacional desde hace un siglo y todavía no detenido. Las imágenes de la Tierra Baja de Aragón captadas por la cámara de este cineasta adquieren una dimensión social y artística que enlazan a la perfección con la riqueza histórica de este tierra».