La oferta cultural durante la semana grande de Zaragoza en este 2020 estará a años luz de la de años anteriores. La cancelación de las Fiestas del Pilar debido a la pandemia ha reducido la programación a su mínima expresión y tan solo los teatros y algún otro escenario puntual han aguantado como bastiones de las artes escénicas y la música. Lógicamente, los grandes eventos brillarán por su ausencia y la suspensión de los Pilares agravará aún más la delicada salud del sector cultural aragonés. Compañías teatrales, técnicos, músicos, actores, programadores... La lista de empresas y profesionales que se van a ver afectados por la cancelación de las fiestas es amplia y lo peor es que llueve sobre mojado. Ahora, lo único que pide el sector es que el presupuesto que el Ayuntamiento de Zaragoza tenía reservado para los Pilares no se destine a otras partidas y se utilice para programar actuaciones alternativas en los próximos meses.

GRANDES ESCENARIOS

Sin Espacio Zity ni conciertos en el Pilar

El virus obliga y, lógicamente, a nadie le entra en la cabeza la celebración de grandes eventos con la que está cayendo. Una de las principales ausencias será la del Espacio Zity de Valdespertera, cuyo aforo en estos últimos años rondaba las 25.000 personas. El año pasado acogió grandes conciertos como el de Fangoria, Aitana, Don Patricio o Sho Hai. Otro de los escenarios que se echarán de menos será el de la plaza del Pilar, tradicionalmente epicentro de las fiestas. En el 2019 actuaron ahí Los Secretos, Amaral y León Benavente, entre otros. La Carpa Aragón, en Macanaz, tampoco se celebrará, así como los conciertos que se programaban en diferentes plazas del Casco Histórico.

ARTES ESCÉNICAS

Los teatros, la gran excepción

Los Pilares son terreno fértil para el teatro. Las funciones abundan siempre en la semana grande de la ciudad y este año va a ser de lo poco que se salvará de la quema. El Teatro Principal, el del Mercado, el de las Esquinas o Arbolé han programado una variada oferta e incluso en el Teatro de los Salesianos se ha habilitado un espacio. Manolo Royo tampoco faltará. Todo, eso sí, con aforo limitado.

PROGRAMACIÓN INFANTIL

La ausencia de Río y Juego y los Cabezudos

Sin duda, los cabezudos serán los grandes ausentes entre los más pequeños de la casa, pero en cuanto a programación infantil, al menos, se ha podido salvar el proyecto del Parque de las Marionetas, que este año se refugiará en el interior del Teatro Arbolé y las Esquinas. Ambos espacios acogerán las funciones de títeres que en los últimos años se celebraban en el Parque Grande, lo que supondrá un pequeño balón de oxígeno para muchas compañías aragonesas. Lo que también echarán de menos los niños serán las actividades de Río y Juego en la Expo y los Títeres de Cachiporra de la plaza de los Sitios, que no se celebrarán.

JOTAS

Las castañuelas apenas se escucharán

Muchos zaragozanos aprovechaban los Pilares para lanzarse a la calle a escuchar jotas. Este año no podrá ser y el sonido de las castañuelas se escuchará mucho menos en la ciudad. El escenario de la Fuente de la Hispanidad, que el año pasado se recuperó para acoger a los grupos de folclore, no se montará. Tampoco se celebrará el certamen oficial de jota en la Sala Mozart del Auditorio, aunque el ayuntamiento trabaja para que este festival tenga lugar durante varios fines de semana de noviembre.

FERIA TAURINA

La Misericordia seguirá cerrada

Zaragoza se quedará este año sin la tradicional feria taurina del Pilar. Desde la irrupción del virus, ninguna plaza española de primera categoría ha acogido una corrida (la de Córdoba lo hará este lunes) y la de la capital aragonesa no será una excepción.