Fences no es tanto una película basada en una obra teatral como una obra de teatro filmada, un pedazo de ficción honorable y valioso pero del todo desubicado. Tras la cámara, Denzel Washington parece asumir que cualquier revisión del drama homónimo de August Wilson habría sido blasfema. Retrato de un barrendero resentido por sus sueños rotos de gloria deportiva y por su condición de hombre negro en la América de los 50, y cuyo carisma solo es superado por su monstruosidad.

N. S

???

Fences

Denzel

Washington