Es probablemente el festival más original (si entendemos esta concepción como algo diferente) de los que se celebran en Zaragoza y, aunque prácticamente es un recién llegado (celebra este año su tercera edición), el que Retina, festival de cine y música en directo de Zaragoza, haya conseguido sobrevivir a esta crisis es un alivio para combatir la homogeneidad en la que a veces parece estar instalada la cartelera de la capital aragonesa.

«Estamos muy contentos porque ha sido la edición más compleja de sacar adelante -explica uno de los organizadores, Eduardo Pérez, de Born! Music- pero, al final, por el compromiso con los artistas a los que les habíamos hecho los encargos y con el propio proyecto que si se detenía corría peligro, hemos conseguido salvar esta edición». Y el resultado, una vez más, no puede ser más atractivo pese a todo. La columna vertebral de la cita es la proyección de películas con música en directo: «Hay grupos que llevan trabajando en la idea un año y medio como es el caso de Santoral que musicarán El fantasma de la libertad, de Buñuel», explica el propio Eduardo Pérez. Serán ellos los que abran la lista de los cuatro conciertos con proyección programados el 5 de noviembre en el Teatro del Mercado. Al día siguiente, en el CaixaForum, tendrá lugar uno de los platos fuertes, Olivier Arson le pondrá la música a El reino, de Sorogoyen, y aunque él ya ganó un Goya con la banda sonora de la cinta, ha compuesto otra para esta proyección: «Admiramos mucho su trabajo y ha sido un lujo poder trabajar con él, desde que se lo planteamos le entusiasmó mucho la idea y también a Sorogoyen. Quien haya visto la película ya puede ver cómo la música va todo el rato empujando la acción».

De regreso al Teatro del Mercado, el 7 de noviembre será el turno de Güiro Meets Russia y el filme TXHX1138, de George Lucas, mientras que el último concierto con proyección será el de Javier Aquilué (Kiev cuando nieva) y María José Hasta con Análisis de sangre azul, de Blanca Torres y Gabriel Velázquez.

«Es un proyecto que surge de los inicios del cine y del cine mudo obviamente -dice Eduardo Pérez-. Nosotros queríamos llevar esa idea al cine contemporáneo, es verdad que algunas veces se hacen cosas con cine mudo pero nosotros queríamos actualizarlo llevando el nivel sonoro al cine más contemporáneo y subrayar la idea de cómo puede cambiar la música las imágenes». Todo esto además lleva a un siguiente objetivo que está en el ADN de Born!_Music en casi todos los trabajos que realiza: «Con esto, pretendíamos que los músicos pudieran abrir nuevas líneas de trabajo. Pasa que en algunos casos parece que tienen trabajos muy definidos y queríamos sacarlos de ahí y verlos en otro formato y de una forma diferente a lo que es habitual en su carrera», insiste Eduardo Pérez.

Retina completa además los conciertos con proyección con un ciclo de charlas y otro de proyecciones. En el primero, este año, se han programado dos citas. La primera, con la que se abrirá el festival, será la de Pelayo Gutiérrez que hablará sobre El arte del sonido el 28 de octubre en el IAACC Pablo Serrano. Gutiérrez cuenta con tres Goyas y 14 nominaciones por las más de 200 películas en las que ha trabajado, incluyendo varias de Alejandro Amenábar y Pedro Almodóvar: «Probablemente es el editor de sonido más importante a nivel nacional y una de esas personas de la industria audiovisual que pasa desapercibidas pero con una trayectoria increíble. Con él, además, queremos destacar una labor, la de editor de sonido que está un poco escondida», comenta Pérez. La otra conferencia del programa será la que pronunciará Manuel Vilas sobre Ennio Morricone el 4 de noviembre también en el IAACC_Pablo Serrano.

Retina se completará con las proyecciones de Making waves; the art of cinematic sound, de Midge Costin, el 29 de octubre; y de Score: a film music documentary, de Matt Scharde, el 31 de octubre. Ambos documentales se podrán ver en la Flimoteca de Zaragoza.

Retina cumple, como decíamos, su tercera edición, aunque ya va haciéndose con un nombre en la oferta zaragozana, tal y como explica el promotor Eduardo Pérez: «Llevamos dos ediciones y desde el principio estuvimos bastante contentos con la respuesta. Creemos que uno de los factores del proyecto es unir a dos públicos distintos, a los que le gusta el cine y a los que les gusta la música que puede coincidir, pero no siempre. Tenemos público que acude exclusivamente por el artista o por la película y es muy interesante poder abrir las líneas del público. Es, en general, una audiencia bastante diversa, hay una parte fiel que ya espera que el festival sea y que siempre tiene una reacción muy positiva pero también tenemos la sensación de que te puedes encontrar con un público muy inesperado, que ha caído por ahí por alguna razón y que igual nunca hubieran ido a ver a ese músico».

Las proyecciones y las charlas son de entrada libre hasta completar el aforo y para los conciertos con proyección los precios oscilan entre los 6 y los 12 euros aunque el de Güiro meets Russia también es de entrada libre hasta completar el aforo