Música, canto, interpretación y danza, todo mezclado y trenzado en un solo espectáculo. Es lo que se podrá disfrutar en el Palacio de Congresos de Jaca esta noche a las 22.00 horas con la llegada de la compañía Italiana Soqquadro y su espectáculo Stabat Mater - El Proyecto Vivaldi, un ejercicio artístico que busca que el espectador pierda el horizonte de los límites entre los distintos géneros de las artes escénicas fundiéndolos en una única y ecléctica obra.

«En Soqquadro, que literalmente significa patas arriba, no solo intentamos unir los diferentes géneros musicales como jazz, clásica, electrónica o música tradicional, sino que también rompemos las barreras entre los lenguajes artísticos como la danza, el arte visual o el canto. De este modo creamos un género musical aún más indefinible», explica Vincenzo Capezzuto, único bailarín y protagonista absoluto del espectáculo, con permiso de la orquesta compuesta por diez músicos que le acompaña sobre las tablas en este particular espectáculo que se enmarca dentro del género clasical crossover.

MOVIMIENTOS DEL BAILARÍN

Soqquadro nació en la ciudad italiana de Bolonia en 2011, fruto del interés común que Capezzuto compartía con el músico y adaptador Claudio Borgianni por las producciones artísticas musicales y teatrales italianas de finales del siglo XVI y comienzos del XVII. Este dueto se complementa esta vez con la figura del reputado coreógrafo y director artístico del cuerpo de baile del Teatro alla Scala de Milán, Mauro Bigonzzeti. «Conozco a Mauro desde hace más de 11 años, desde que el me vio en San Carlo de Nápoles bailando una coreografía suya. Tras aquello me invitó a Aternalleto, su compañía de danza, donde trabajé durante siete años, ningún otro coreógrafo conoce mis condiciones y mis características como bailarín y como persona», asevera Capezzuto.

Además de la danza, la otra parte imprescindible del espectáculo corre a cargo del ya mencionado Claudio Borgianni, que realiza una serie de arreglos y variaciones sobre el Stabat-Mater de Vivaldi para acompasarlo a los movimientos del bailarín. «Claudio ha reconstruido y ha recompuesto a Vivaldi, incluso ha añadido batería y música electrónica en determinados momentos para hacer la danza más física en armonía con instrumentos más tradicionales como el archilaúd», explica el bailarín, que también acopla su voz a la composición en un ejercicio extremadamente complejo de alternar la danza con el canto lírico. «Se trata de un ejercicio muy complejo, hay que trabajar la resistencia física y tratar de ahorrar energía a lo largo del espectáculo, los años de experiencia ayudan».

No es la primera vez que Soqquadro viene a nuestro país, parada habitual de las múltiples giras que la compañía ha realizado alrededor de países como Bélgica, Francia, Italia, Holanda, Alemania, Rusia, o Ecuador. Tampoco es la primera vez que se va a escuchar esta adaptación del Sabat- Matter en España, ya que el pasado abril Soqquadro actuó en Santander. «Llevo actuando desde los 15 años como bailarín y cantante y siempre que he venido a España he sido acogido con mucho calor e inspiración», indica Capezzuto, que recomienda el espectáculo a «aquellos que tengan curiosidad por ver algo diferente y que quieran ser abrumados por las emociones de ver música, danza y puesta en escena en un solo espectáculo».