La escritora catalana Rosa Regás se mostró ayer satisfecha por su designación como directora de la Biblioteca Nacional, nombramiento que será aprobado mañana, viernes, en Consejo de Ministros, y que valoró como un "reto" en su trayectoria profesional.

Regás, quien ha estado esta semana en la provincia de Huesca para tomar parte en unas charlas de animación a la lectura organizadas por el gobierno aragonés, hizo estas manifestaciones antes de participar en una conferencia-coloquio sobre literatura, celebrada en la localidad altoaragonesa de Monzón.

La escritora catalana, quien aseguró haber recibido "con sorpresa" la noticia de su nombramiento para estar al frente de esta institución, afirmó que no tenía planes concretos de actuación en la Biblioteca Nacional.

Sin embargo, destacó que sus primeras acciones se dirigirán a conocer el estado y funcionamiento actual de la institución cultural.

Rosa Regás se mostró satisfecha, por otra parte, de su invitación a tomar parte en las charlas de animación a la lectura que se vienen desarrollando por todo Aragón, así como recordó haberse manifestado en contra del trasvase del Ebro.