?

Amityville: El despertar

Franck

Khalfoune

Aunque visualmente menos tosca que la sucesión de producciones con la palabra Amityville en su título estrenadas directamente en DVD, la 18ª entrega de esta saga quizá supere a sus predecesoras en capacidad para aburrir. Los sustos son todos mediocres, sus coqueteos con el tipo de ironía metatextual popularizada por Scream son neutralizados por su nada irónico reciclaje de clichés del género, y la mayor parte es dedicada a las tediosas tensiones entre una madre y una hija. . Lo más inquietante de la cinta es el nombre Weinstein en sus títulos de crédito. NANDO SALVÀ