Hace 47 años que Joan Manuel Serrat grabó Mediterráneo. ¿Por qué esperar tres años para celebrar el 50 aniversario de un disco que ha adquirido estatus de leyenda? ¿Por qué no hacerlo ya? El cantautor catalán ha decidido volver a salir a la carretera y a cruzar los mares porque, con 74 años, tiene claro que «el plazo se va acortando» y que la vida «es finita y delicada». Por eso, en abril levantará el telón de Mediterráneo da capo (expresión italiana que significa volver al principio), una gira con la que recorrerá España y América Latina y que orbitará alrededor de los diez temas del álbum de 1971, canciones grabadas a fuego en varias generaciones, como Lucía, Aquellas pequeñas cosas, Pueblo blanco y, evidentemente, el icónico himno que da nombre al disco.

En la gira -que llegará a la sala Mozart del Auditorio de Zaragoza el 21 de junio- todas las canciones sonarán como sonaron entonces, en 1971. El público las escuchará con los mismos arreglos con los que fueron compuestas. «Volvemos al principio», bromea el artista, que reconoce que su música (y la música en general) es «un sentimiento y una riqueza» que se trasmite de generación en generación. Su público no solo lo forman señores de 70 años que se hicieron adultos con sus discos, sino también sus hijos y sus nietos.

LA SALUD, BIEN

Y hablando de nietos, a Serrat no le gusta pasar mucho tiempo fuera de casa lejos de los suyos, que viven en Barcelona y Madrid. Tampoco le gusta, afirma bromeando, que a su mujer se le olvide su cara. Pero la ilusión de homenajear un disco fundamental en su carrera es algo que le desborda y que encara con todas las ganas del mundo. «Si no me viera bien de salud no afrontaría este reto», explica. «Además, me divierte. Espero llegar en óptimas condiciones». Serrat se prepara físicamente para ofrecer 23 recitales en toda España desde abril (la gira comenzará en Roquetas de Mar) hasta diciembre, más los que realizará por su otra casa, América Latina, donde estará hasta marzo del 2019. «Me preparo mucho, pero no voy a contar qué hago», dice con cierto misterio el de Poble Sec, que nunca ha ocultado a los medios sus problemas de salud. En el 2004 le operaron de cáncer de vejiga y en el 2010 entró de urgencias en el quirófano para que le extirparan un tumor en el pulmón. Hay mucha vida por delante. Que nadie vea Mediterráneo da capo como una gira de despedida porque no lo es. «En absoluto», subraya.

Han pasado casi 50 años, pero Serrat nunca ha abandonado su adorado Mediterráneo, mar que hoy es «gloria y miseria». Gloria por razones evidentes. Y miseria, por ser escenario de pateras y de vidas humanas perdidas. La nota de prensa que reparten las organizadores de la gira afirma que «en un tiempo de visados, fronteras y alambradas», el cantautor «ha tenido la feliz ocurrencia de considerarse ciudadano de esa patria líquida que une, más que separa, continentes, tradiciones, creencias y colores de piel». Pero el objetivo de Serrat no es concienciar a nadie, sino emocionar. No hace canciones para «lanzar mensajes sino para ofrecer compañía». Y eso es, precisamente, lo que él se encuentra tras una vida dedicada a la música. «Cuando echo la vista atrás siempre encuentro cariño y comprensión», a pesar, dice, de vivir tiempos «turbios» en los que se diría que «la humanidad ha perdido la confianza en la humanidad» y donde parece que «nunca vamos a alcanzar nuestros sueños». Aunque el guion de los conciertos está todavía por definir, lo que sí está claro es que cada recital, además de los temas de Mediterráneo, incluirá «otras canciones y alguna sorpresa». Será, pues, un «espectáculo mutante y divertido», dijo Serrat que convocó a los medios en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, donde contestó preguntas de todo tipo.

La gira no es la única posibilidad de volver a escuchar canciones míticas. A lo largo del año se reeditará la discografía completa del cantautor del Poble Sec reunida en dos boxsets. El primero de ellos llegará a las tiendas el 13 de abril y agrupará en 11 compactos todas las grabaciones en catalán; el segundo, con su obra en castellano, se pondrá a la venta a finales de año.