Es el encuentro entre tres músicos aragoneses y tres marroquíes, que han trabajado sobre la idea de fusionar la música tradicional marroquí denominada Aïta con con el jazz. Es el proyecto de cooperación Casawasqa XXI, que comenzó hace 10 años en Pirineos Sur y cumple su tercera edición en el Festival en el Camino de Santiago, con la intención de conformar un nuevo sonido y repertorio actualizando este mestizaje entre la cultura magrebí y las aportaciones occidentales de músicos aragoneses. El resultado, después de un tiempo de convivencia y creación entre los músicos, se presenta esta noche en la Ciudadela de Jaca, para darse a conocer después en Marruecos, primero en el Instituto Cervantes de Casablanca (19 de septiembre) y después en el Festival L’Boulevard de la misma ciudad (23 de septiembre).

El proyecto es una colaboración entre ambos festivales, el de la Diputación Provincial de Huesca y el marroquí, y en esta ocasión ha contado con las aportaciones de Gerardo López Pontaque (trompeta y codirección), Pablo Posa (batería), Fernando Lleyda (saxos y clarinete), Abdellah ben Charradi (voz, guembri, outar, mandola y codirección), Simo babara (percusiones) y Mr. ID (bases y discjockey).

las canciones / Juntos y revueltos, partiendo de la tradición pero tamizada por los sonidos contemporáneos que aporta, por ejemplo, el disjockey, han elaborado un repertorio lleno de matices. Estas son las canciones y cómo ellos las explican:

Nostalgic: «Es una canción en que la letra habla de un vagabundo que añora a su familia y la posibilidad de vivir una vida mejor de la que tiene. El sonido de este tema es de balada marroquí con sonidos de blues».

St. Lawrence: «La letra de una vieja canción de amor del estilo Aïta mezclada con una versión funky de la copla a San Lorenzo, también una vieja copla aragonesa. En este tema se pasa por sonidos tradicionales marroquís y sonidos urbanos con la introducción del discjockey y sonidos procesados en los vientos».

Jacablanca: «Es la historia de un hombre que ama a su mujer, pero ella ha partido al Sahara y él realiza un largo viaje en camello en su búsqueda. La sonoridad es una mezcla de música española/marroquí a ritmo de tecno».

Pulida Magallonera: «Es una canción árabe dedicada al trabajo en el campo al igual que la parte instrumental de los vientos y voz que canturrean la melodía de la conocida jota Pulida Magallonera, que también es una canción de trabajo, concretamente es una jota de Olivera. Hemos conseguido una canción a ritmo de trabajo con sonoridades marroquís».

Nas/Nas: «Canción de amor a ritmo de pop árabe. Cantada en árabe e italiano».

Gnawa Trance: «Este corte habla de todas las personas que tienen que emigrar y buscan una vida mejor. Canción discotequera muy enérgica, capaz de hacer bailar a cualquiera».

Outdoor: «Es la despedida y la presentación de los músicos a ritmo de discoteca».