Zaragoza ¡Abracadabra! Con esas palabras mágicas se puso de largo ayer El sótano mágico, una nueva sala de programación estable de magia regentada por Pepín Banzo y Pepe Fernández y situada en la calle San Pablo, 43, que vivió su primera noche mágica de muchas que promete con una buena cantidad de invitados que no se quisieron perder la apertura. La sala cuenta con cafetería y, en un futuro cercano, abrirá un museo de la historia de la magia en Aragón y una biblioteca en el sótano.