Bruce Springsteen comienza hoy en Ciudad del Cabo (Sudáfrica) la gira mundial de presentación de su nuevo disco, High Hopes, más de un cuarto de siglo después de su actuación en la vecina Zimbabue para pedir el fin del régimen racista sudafricano.

The Boss cantó entonces ante unos 15.000 sudafricanos que habían viajado hasta la capital zimbabuense para pedir el fin de la segregación racial en Sudáfrica y en contra de la obligación de servir en el ejército del apartheid. Lustros después de participar en aquella gira de Amnistía Internacional (AI), Springsteen aterrizó el viernes en Ciudad del Cabo, donde ofrecerá, en el Velódromo de Belville, las primeras tres actuaciones de una gira que le llevará también a Australia, Nueva Zelanda y Estados Unidos.

El músico estadounidense completará la que es la primera visita de su carrera a Sudáfrica con un cuarto concierto en el estadio FNB de Soweto (Johannesburgo) el próximo 1 de febrero.

Publicado el 14 de enero, High Hopes ha conseguido colocarse en el número uno de las listas de éxitos en EEUU, Reino Unido, España y otros siete países.

La llegada del autor de Born in the USA al país austral se produce menos de dos meses después de la muerte del expresidente sudafricano Nelson Mandela, uno de los héroes de Springsteen y a quien el cantante ha homenajeado en diversas ocasiones.