El humorista venezolano Manuel Rodríguez Lilian actúa esta tarde por primera vez en Zaragoza en el Instituto aragonés de la Juventud (calle Franco y López, 4), a partir de las 17 horas. Se trata de una de las figuras mas destacadas del exilio cultural venezolano, que usando como única arma el humor se ha convertido en un fenómeno viral con mas de 600.000 seguidores y que llena teatros en todo el mundo... excepto en su país natal del que salió como consecuencia de la situación que se vive. Pondrá en escena Yo soy Lilian, un espectáculo que ha sido un rotundo éxito agotando en todas las funciones en los diferentes países de Latinoamérica, Europa y Estados Unidos. El fenómeno Lilian ha salido de las pantallas de Instagram para trasladar a su público por medio de sus personajes a esa Venezuela de la que se debe estar orgulloso, en un espacio acompañado de anécdotas, risas y reflexión. Las entradas cuestan entre 15 euros (las normales) y 25 euros (VIP).

-Para los no iniciados en sus andanzas, ¿de dónde surge un personaje como Lilian?

-Lilian es mi alter ego, viene a ser la consecuencia de haber salido de Venezuela por la situación política y encontrarme con este alter ego que me hizo descubrir que yo creo que en el fondo soy muy amargado (risas). Todas las situaciones que me iban pasando desde que salí de mi país las llevé al humor a través de los vídeos. Lilian nació de esa manera, de mi experiencia trabajando como camarero en el exterior.

-¿Se convirtió también en una forma de superar las dificultades con las que se iba encontrando?

-Bueno, sí... (Piensa) Lo que pasa es que empecé a trabajar, empecé a vivir esta experiencia y entonces a contar realmente todo lo que me pasaba y la verdad es que no sabía que me iba a llevar a todo esto, no fue nada planeado.

-¿No deja de ser una demostración de que el humor puede con cualquier situación?

-Claro, totalmente, y también de que algo negativo lo puedes convertir en algo positivo y mira todo lo que puede pasar. Ha sido una experiencia increíble, de estar en esa situación de verme lejos de mi país, de no acostumbrarme del todo porque al principio cuesta mucho y sacarlo a través del humor. Ha sido algo muy positivo.

-También muestra otro punto de vista sobre Venezuela que hoy en día parece que solo se habla de una cosa...

-Una de las cosas que me pasaba mucho cuando salí de mi país era que todo el mundo cuando te hablaba de Venezuela únicamente te hablaba de política porque evidentemente estamos muy politizados. Entonces, yo lo que hacía en los vídeos era resaltar la parte buena de Venezuela, además, con un personaje que es tan venezolano, que no se adaptaba a las otras culturas, Lilian, rescataba todo lo positivo que tenía Venezuela. Era mi respuesta a todo aquello.

-Actúa esta tarde en Zaragoza con su espectáculo Yo soy Lilian, ¿qué se va a encontrar el público en él?

-Voy a contar muchas cosas parecidas a Instagram aunque aquí hay mucha más interacción. Además de Lilian, saco otros personajes en escena que no existen, que solo existen para el monólogo y que se conectan también con el personaje y con mi historia. También te puedo decir que es un show multimedia, dinámico y muy diferente al típico stand up comedy. No es simplemente la persona con el micro, aquí hay mucho que ver.

-¿El público puede participar en el espectáculo?

-Durante todo el show tengo interacción con el público pero no es que actúen directamente conmigo en la tarima. Aun así, intervienen, sí.

-Le tengo que preguntar dada la situación actual aunque usted no deja de ser un artista pero ¿cómo ve la situación de Venezuela actualmente?

-Fatal, pero ahorita con aires de esperanza. Es la primera vez que por fin se están tomando las riendas del país por la fuerza libre que es este gobierno y creo que no debemos decaer, no perder las esperanzas porque debemos salir pronto de este narcogobierno que tan poco nos representa como venezolanos. Tenemos que tener mucha fe y ser constantes. Los venezolanos que estamos en el exterior la mejor manera que tenemos de ayudar es informar de todo lo que está pasando para que realmente el mundo se entere de la situación de nuestro país.

-¿Hace cuánto salió de Venezuela?

-Me fui del país hace dos años y medio.

-Doy por descontado que no fue nada fácil para usted tomar la decisión...

-Para mí fue muy difícil, yo era el común venezolano que tenía un sueldo mínimo pero que no te alcanzaba para nada, ni para llenar la nevera de tu casa así que no tuve más salida.