18 bailarines de danza, 16 chicas y dos chicos, del Conservatorio Municipal Profesional de Danza de Zaragoza viajaron ayer a China para participar en un intercambio por primera vez. La idea la propuso hace aproximadamente cuatro meses José Luis Rubio, catedrático del departamento de Geografía de la Universidad de Zaragoza, debido a que es uno de los integrantes de una empresa que se dedica a realizar intercambios de estudiantes universitarios entre China y España. El hijo de este está casado con Gu Li, una exbailarina del Ballet Nacional de China y ambos dirigen un centro de música y danza denominado Shichuang ubicado en Taizhou, a 80 kilómetros de Shangai en el que se forman más de 500 alumnos. De esta circunstancia surgió la idea de compartir experiencias entre los estudiantes aragoneses y chinos.
Veinte días de convivencia
Para Rafael Fernández, director del Conservatorio Municipal Profesional de Danza de Zaragoza, "el intercambio consiste en que alumnos nuestros del Conservatorio de Danza vayan durante 20 días a este centro de danza para recibir las clases que imparten. Además, estarán alojados en casas de familiares chinos de los mismos alumnos".
Los alumnos del Conservatorio de Danza partieron ayer pero llegan hoy a tierras chinas. La duración del intercambio, que realiza por primera vez el Conservatorio de Danza, será de alrededor de tres semanas, hasta el 16 de agosto cuando volverán los alumnos a España. Más tarde, será el turno de los estudiantes chinos, que viajarán hasta España para completar el intercambio aunque las fechas definitivas están todavía por confirmar.
Trasvase cultural
Para Rafael Fernández "no es solamente un intercambio de conocimientos de danza sino que pretende que sea un intercambio cultural" para que los estudiantes aragoneses sean conocedores de la tradición, la enseñanza, la familia, la comida, los hábitos y las costumbres chinas. Por ello, considera que el intercambio será "muy enriquecedor" para los alumnos.
El director del Conservatorio de Danza pone énfasis en que "es sobre todo un intercambio cultural y lo que se busca es continuidad en el tiempo, que se vuelva a repetir el próximo año con otros estudiantes del conservatorio".
