DIRECTOR DJ Caruso

INTERPRETES Angelina Jolie, Ethan Hawke

PAIS EEUU AÑO 2003

CINES Augusta, Elíseos

Las películas de atmósfera malsana centradas en la captura de algún demente asesino en serie siguen estando a la orden del día en el cine estadounidense. Con la salvedad de que el escenario de Vidas ajenas es la fría Montreal, todo en la película es más o menos parecido a tantos otros filmes de similar tema realizados tras la estela victoriosa de El silencio de los corderos y Seven .

Como en la primera de estas dos cintas, quien se encarga del caso es una agente federal. Tiene métodos distintos a los de Jodie Foster en El silencio de los corderos , y no hay un refinado psicópata al estilo de Hannibal Lecter que le proporcione ayuda.

De hecho, que la actriz elegida sea Angelina Jolie marca considerablemente el tono y la tendencia del filme. Hosca como la propia intérprete, más bien solitaria e individualista, con aspecto de superioridad --sobre todo en relación a los más bien torpes policías canadienses con los que debe colaborar--, la experta protagonista de Vidas ajenas pasea flotando sobre el relato ensombreciendo a su paso al resto de personajes de más o menos entidad.

Los guionistas abusan de las pistas falsas y de los personajes ambiguos para despistar al espectador o crearle unas expectativas que rara vez se cumplen. Tampoco le sacan demasiado lustre al criminal, un tipo que colecciona las identidades de sus víctimas.

En favor de DJ Caruso debe decirse que no se regodea en la estética más aparente y efectista de los filmes con asesino seriado, e incluso introduce algún detalle de humor macabro. Es el caso de la aparición de la heroína, estirada en el interior de la tumba en la que han encontrado a una de las víctimas. El filme no depara sorpresas. La primera conclusión del mismo llega cuando aún faltan 15 ó 20 minutos, por lo que esperar el segundo desenlace es taera obligada y no especialmente satisfactoria.