La banda californiana Vintage Trouble derrochó ayer soul, rock y blues en el espectacular concierto que ofrecieron en el festival Slap! de la capital aragonesa, donde mostraron su garra durante una hora y media de actuación y culminaron un gran primer día de festival.

El grupo de Los Ángeles llegaba a la ciudad precedido de su buena fama por sus arrolladores directos, haber teloneado a gigantes como AC/DC y encontrarse entre los favoritos del director Martin Scorsese, unas credenciales que cumplieron con creces en las tablas del anfiteatro Slap!.

Antes de comenzar su ceremonia, el primer día de festival discurría con placidez y una temperatura perfecta en la noche, ingredientes que ya se pudieron saborear en la destacable actuación previa entre los árboles de la banda de soul en español zaragozana Los Volcanes.

Arrancó fuerte el grupo integrado por el cantante Ty Taylor, el guitarrista Nalle Colt, el bajista Rick Barrio y el batería Richard Danielson, quienes salieron a comprometer al público desde el primer momento con Taylor, un tremendo "frontman", saltando, haciendo piruetas, exprimiendo el espacio del escenario al máximo y acabando por los suelos.

Mientras el cantante demostraba su hiperactividad y una voz privilegiada, la Les Paul de Colt remataba solos y riffs descarnados que daban el contrapunto rockero al espíritu soul de la banda, una combinación que encontró inmediatamente la conexión con los allí presentes.

Tras este fulgurante inicio, y tras preguntar cuántos de los asistentes no habían visto antes un directo de la banda, el cantante se congratuló de ver a muchos "vírgenes" en su liturgia para, a partir de ahí, bajar las revoluciones del recital con una serie de baladas, como "Gracefully", que demostraron una tremenda capacidad para el falsete del vocalista.

La batería atronadora que inicia "Blues hand me on", cual si "Black dog" de Led Zeppelin se tratase, hizo regresar la potencia a un espectáculo que alcanzaba su ecuador con los músicos desatados y Taylor dándose un baño de masas al bajar a cantar a la grada, rodeado del público.

Y es que, por momentos, parecía que el espíritu de James Brown poseía el cuerpo de un cantante que demostraba ser un tremendo maestro de ceremonias, pasando del éxtasis bailarín a los monólogos previos a cada canción.

El slide guitar sacado del rincón más pantanoso del averno de "Run like the river" iba llevando al clímax la actuación con las palmas de todos los asistentes y un aumento paulatino, pero sin piedad, de su intensidad.

El tema acabó con la apoteosis de Taylor subido a la mesa de mezclas, en la otra punta del escenario, que tras ser transportado en volandas por los asistentes hasta las tablas, concluyó el "show" con "Knock me out", artillería pesada soul para cerrar una actuación memorable.

El plato fuerte de la noche no defraudó a nadie y mostró el poderío de esta banda que hoy seguirá su periplo en España con su concierto en el festival Black is Back de Madrid y el lunes en Valencia.

Tras acabar esta inyección de energía, la cumbia "trash" del argentino Rolando Bruno y su Orquesta MIDI se hacían con el escenario del bosque Jäggermusic en una peculiar estampa entre pinos, antes del último concierto de la noche a cargo del granadino Tito Ramírez.

Hoy seguirá la actividad en el Slap! con las actuaciones del dúo femenino garajero Lady Banana, Los Retrovisores, Bigott, la portuguesa Marta Ren, los estadounidenses Archie & The Bunkers y el del cabeza del cartel del festival, el veterano "soulman" y reciente ganador de un premio Grammy William Bell.