La acción de 'Penny Dreadful: City of angels' acontece en Los Ángeles en 1938. La nueva entrega de la serie creada por John Logan no guarda ninguna relación con la anterior, 'Penny Dreadful', que narra una historia alternativa en el Londres victoriano protagonizada por mitos de la literatura fantástica. Es un Los Ángeles 'noir' y de conflictos raciales con los migrantes. El protagonista es el primer inspector de origen chicano de la policía angelina, cuando los mexicanos eran apodados despectivamente pachucos o panchitos. Un caldo de cultivo racista al que se añade la German American Band, unos seguidores de Hitler escondidos detrás de fachadas de lo más normal.

Junto a la trama criminal (el hallazgo de cuatro cadáveres ataviados con mascaras rituales a los que les han sustraído los corazones), la presencia de los nazis norteamericanos es uno de los ejes principales de la serie. La actuación de estos agentes del Tercer Reich, liderados por un educado pediatra, es una muesca más en la tradición literaria, cinematográfica y televisiva que, a través del realismo o la realidad alternativa, ha tratado el tema del nazismo dominando los Estados Unidos. En este caso es un grupo que intenta por todos los medios que el país no entre en el conflicto armado fraguado en Europa. Pero hay muchos otros en los que, a través de ucronías virulentas, se nos ha contado cómo habría sido el mundo si Alemania y Japón hubiesen ganado la guerra y Norteamérica y Europa estuvieran controladas por la Gestapo y la Kempeitai.

EL GÉNERO DE LA HISTORIA ALTERNATIVA

La novela ucrónica de Philip K. Dick 'The man in the high castle' ('El hombre en el castillo'), publicada en 1962 y adaptada a la televisión en la serie homónima durante cuatro temporadas (2015-2019), es la piedra angular de las realidades alternativas gestadas a partir del triunfo de los nazis. En el libro, el presidente Roosevelt es asesinado en 1933, EEUU no entra en guerra la política aislacionista que reclaman los nazis estadounidenses de 'Penny Dreadful: City of angels' pero a pesar de ello, y tras el triunfo de las fuerzas del eje, el país queda controlado por los japoneses (Costa Oeste) y alemanes (Costa Este). Entre el Nueva York germanizado y el San Francisco orientalizado se desarrolla una historia de resistencia que en la serie tiene un notable añadido, la música. La banda sonora de la primera temporada está formada por grandes estándares a cargo de Beck, Sharon Van Etten, Norah Jones o Karen O que se corresponden con las músicas lanzadas por la emisora de radio de la resistencia.

Ideada por David Simon, uno de los gurús de la tele contemporánea ('The wire', 'The deuce'), a partir de la novela de realidad alternativa y autobiografía escrita por Philip Roth, 'La conjura contra América' propone una ucronía devastadora en la que el héroe del aire Charles Lindbergh, de convicciones aislacionistas y cercano a las políticas de Hitler, gana las elecciones a Roosevelt en 1940. Bajo su mandato crece la fobia hacia los judíos y renace en varios estados el racismo secular. Es una historia alternativa, cierto, pero conviene recordar que durante los años 30 se extendió realmente en Estados Unidos un furibundo antisemitismo: un tercio de la población estaba de acuerdo con las leyes discriminatorias contra los hebreos.

Menos conocido, pero de tema excitante, es el telefilme 'Patria', interpretado en 1994 por Rutger Hauer a partir de una novela de Robert Harris. Hitler ha ganado la guerra y anexionado al Reich toda Europa, excepto la Unión Soviética. Corre el año 1964 y el führer quiere establecer una alianza con el presidente John F. Kennedy, quien no ha sido asesinado en Dallas. Una pesquisa policial puede sacar a la luz los crímenes contra la humanidad perpetrados por Alemania y dar al traste con el acuerdo que dejaría a los soviéticos en clara desventaja.

EL ASESINATO DE CHURCHILL

Precisamente en 1964, Michael Caine protagonizó en televisión 'The other man': tras el asesinato de Winston Churchill en 1940, el Reino Unido se ve obligado a sellar la paz con Alemania y adaptarse al mandato de los nazis. A los británicos parecía preocuparles mucho la cuestión, porque en 1965 apareció 'It happened here', en la que los nazis se hacen con el control de un Reino Unido que se divide entre la colaboración de los fascistas ingleses y la resistencia organizada. Hasta en el galardonado penúltimo episodio de la primera temporada de 'Star trek', 'La ciudad al borde de la eternidad' (1967), se hicieron eco de las ucronías nazis. En un prodigioso salto temporal, el capitán Kirk, Spock y otros miembros de la Enterprise aparecen en el Nueva York de los 30 y alteran la existencia de una mujer hasta el punto de que esta lidera un movimiento pacifista que retrasa la entrada de EEUU en la guerra, permitiendo así a los nazis desarrollar la bomba atómica con la que ganarán la contienda.

Además de Philip K. Dick, hay otras novelas que han abordado la realidad alternativa de modo muy creativo. Por ejemplo 'Swastika Night', escrita en 1937 por Katharine Burdekin, fantaseaba con un mundo dominado por los nazis ya antes de comenzar la guerra, y la más reciente 'El sindicato de la policía yiddish' (2007), de Michael Chabon, imagina la existencia de los judíos refugiados en un espacio federal que pertenece a los EEUU, sin que se haya constituido el Estado de Israel. Y en cuanto al cómic, la traslación muy libre que Damon Lindelof ha realizado del 'Watchmen' de Alan Moore propone otro gran universo alternativo con Robert Redford como presidente del país en el que un grupo de segregacionistas denominados los Cíclopes utilizan el mesmerismo para enfrentar a los negros entre ellos; el mesmerismo fue una de las prácticas más queridas por buena parte de los ocultistas nazis.

CRIMINALES DE GUERRA REFUGIADOS EN EEUU

Otra línea bien explorada, sobre todo por el cine, es la de los criminales de guerra nazis refugiados en Estados Unidos tras la victoria aliada (también hay películas ubicadas en otros continentes, como 'Los niños del Brasil', con Gregory Peck en el papel de un Josef Mengele que prosigue con sus monstruosos experimentos genéticos en Brasil). Dos títulos destacan especialmente, 'El extraño' y 'Marathon man'.

El primero, dirigido e interpretado por Orson Welles en 1946, es un relato opresivo en el que Edward G. Robinson, agente de la comisión de crímenes de guerra, busca en una pequeña localidad de Connecticut a uno de los responsables del Holocausto, de quien solo sabe que siente una especial fascinación por los relojes antiguos.

'Marathon man' (1976), mucho más popular, es recordada sobre todo por las torturas que el criminal nazi encarnado por Laurence Olivier inflige a Dustin Hoffman con los utensilios de un dentista. La trama de intriga el nazi quiere recuperar una partida de diamantes confiscados a los judíos en el campo de Auschwitz no impide que sea una película que describe bien el entramado que permite a los nazis vivir, y vivir bien, en otros lugares. Citemos también 'La caja de música' y la delirante 'Un lugar donde quedarse', protagonizada por un músico de rock gótico encarnado por Sean Penn como si fuera el Robert Smith de The Cure, que da caza a un nazi agonizante escondido en los confines del país.

Y ALGUNAS BROMAS DESENGRASANTES

Por supuesto, el tema de los nazis escondidos u organizados en EEUU puede tomarse también a broma (y hay comedias en torno al nazismo en general bien recordadas: 'El gran dictador', 'Ser o no ser', 'Jojo Rabbit'). Una gamberrada mayúscula como 'Granujas a todo ritmo', la comedia musical de los Blues Brothers de la que acaba de celebrarse el 40 aniversario de su estreno, muestra a una partida de risibles nazis de Chicago, ataviados con su pulcro uniforme y sus relucientes esvásticas, persiguiendo a John Belushi y Dan Aykroyd por que estos les han obligado a lanzarse al río si no querían ser atropellados en plena manifestación aria.

Pero nada como 'Iron sky', una distopía finlandesa de ciencia ficción y comedia en la que los nazis, tras perder, esta vez sí, la guerra, huyen a la cara oculta de la Luna y crean una flota para asaltar la Tierra y crear un Cuarto Reich. El filme, realizado en 2012, ha tenido ya dos continuaciones igual de descacharrantes.