Las nuevas tendencias artísticas que se aplican a la cerámica pueden verse reunidas desde ayer y hasta el domingo en la sala Multiusos del Auditorio de Zaragoza en una nueva edición, la cuarta, de la Feria Internacional de Cerámica Contemporánea (Cerco), donde muestran su producción un total de 73 ceramistas repartidos en 35 expositores y procedentes de Argelia, Corea, Italia, Portugal, Alemania y España.
La Feria es el punto culminante de Cerco, después de que hace tres semanas se inaugurase en el museo Pablo Serrano una exposición con las obras presentadas al Premio Internacional y se abriesen en distintas salas de la ciudad y en Muel hasta ocho que convierten en estos días a la comunidad aragonesa en verdadero referente europeo de la cerámica contemporánea. De hecho, ayer, además de la Feria, se inauguró en el centro de Artesanía la exposición Todo a cien , y se entregaron, en la Multiusos, los galardones a los premiados del concurso internacional.
Y es que Cerco ya es una realidad consolidada, como bien apuntó en la inauguración el consejero de Industria, Comercio y Turismo del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga, quien recordó que las 248 obras de 137 artistas de todo el mundo que se presentaron al Premio Internacional deja claro que la cita zaragozana "se ha convertido en un foco de atracción de un sector que exhibe su pujanza con autoridad".
ENCUENTRO Y COMERCIO
Tras apuntar que la celebración de Cerco en Aragón "no es casualidad, pues esta es una tierra de barro", Aliaga quiso también dejar claro que la Feria, además de ser un escaparate del arte cerámico "es también comercio" y, al mismo tiempo "un encuentro de ceramistas, compradores, y amantes del arte".
Aliaga inauguró la feria acompañado por la teniente de Alcalde de Cultura, Rosa Borraz; la diputada de Cultura de la DPZ, Cristina Palacín; el presidente de Cepyme, Fernando Machín; el jefe del área cultural de la CAI, Antonio Abad y el presidente de la Asociación de Artesanos de Aragón, Antonio Carasol. Este último hizo hincapié en la importancia que ha tomado una cita que se ha convertido "en todo un apoyo a la creación plástica contemporánea en cerámica, mostrando las diferentes ideas estéticas que se dan en los 30 países que participan tanto en la Feria como en las exposiciones o en el concurso ".
Una variedad de estilos y técnicas que se hace evidente en la sala Multiusos y que agradecen los participantes. Un buen ejemplo son los argelinos Saad Nadi, licenciado en Bellas Artes, y Abdelaziz Bacha, premio de la Unesco en el 2003, quienes gracias a un proyecto bilateral con la Universidad Complutense han recalado en Zaragoza no sólo para mostrar sus obras, sino "para ver todo lo que se hace en el mundo en cerámica pero no sólo en el aspecto artístico, sino también expositivo y comercial", señalan. Y es que, como apuntan, "en Argelia la realidad es muy dura y es necesario conocer otro espíritu para salir adelante; en nuestro país la cerámica tiene una tradición muy antigua, pero apenas ha evolucionado", recalcan.
O la alemana Jutta Winckler que ha llegado a Cerco auspiciada por Sio-2 y, además de sus piezas, muestra a través de un vídeo el singular sistema de cocción de las mismas. "Estoy contenta porque la gente se interesa por mi trabajo, pero sobre todo por la mezcla de estilos que aquí puede verse", señala.
La feria cuenta también con 13 artistas aragoneses, además de asociaciones y creadores llegados de Cataluña, Euskadi, Valladolid, Alava, Valencia, Navarra o Baleares.
