Un grupo de 17 estudiantes, conocido como Al Uali, fue condenado la semana pasada en Marruecos a penas de prisión por unos disturbios en la Univesidad de Marrakech que acabaron con el resultado de un ciudadano muerto, homicidio involuntario por el que ninguno de ellos ha sido condenado. La sentencia ratifica la dictada en primera instancia donde se condenó a 10 años de prisión a 4 de ellos y a 3 años de prisión al resto. Los estudiantes denuncian que en su detención fueron preguntados únicamente por cuestiones relacionadas con el Frente Polisario y con su actividad política, nunca por los hechos por los que se les acusaba.