La cooperación descentralizada para el desarrollo, aquella que realizan las administraciones subestatales, lleva más de treinta años transformado miles de vidas. Pero la emergencia del covid-19 ha vuelto a poner en cuestión un sistema socioeconómico incapaz de dar respuestas a las necesidades de las personas.

Las comunidades han acordado las siguientes propuestas, sobre las que tomarán sus decisiones a partir de ahora:

  1. Equilibremos lo urgente y lo importante.
  2. Apostemos ahora más que nunca por la localización de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible.
  3. Avancemos en la sostenibilidad.
  4. Defendamos los derechos humanos.
  5. Revaloricemos el bien común y la participación.
  6. Unamos esfuerzos para impulsar el enfoque de género, el empoderamiento de las mujeres y evitar retrocesos en el ejercicio de sus derechos.
  7. Reforcemos una educación para la transformación social.
  8. Impulsemos la coherencia de políticas para el desarrollo sostenible.
  9. Agilicemos compartir conocimientos en base a la experiencia acumulada.
  10. Pongamos la ciencia, la investigación y las tecnologías digitales al servicio del bien común.
  11. Generemos alianzas entre actores diversos.
  12. Profundicemos en la apuesta por las dinámicas y las iniciativas locales.
  13. Reafirmemos nuestro compromiso con la financiación del desarrollo global.
  14. Gestionemos los recursos con transparencia y rindamos cuentas.