La Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Trans y Bisexuales (FELGTB) denuncia que España ha dejado de estar entre los diez países europeos más respetuosos con los derechos del colectivo LGTBQI, al haber caído hasta la posición número once en el último informe anual sobre esta materia, elaborado por ILGA Europa, organización internacional de referencia en estos asuntos.

Uge Sangil, presidenta de la FELGTB, entidad miembro de ILGA Europa, sostiene que se trata de «una caída en picado», ya que es la posición más baja que ocupa nuestro país desde que, en el año 2010, se empezó a elaborar esta clasificación.

«España llegó a posicionarse en el 2011 como el segundo país europeo donde más reconocidos estaban los derechos» del colectivo LGTBQI, señala Sangil. «Desde entonces, ha ido descendiendo progresivamente hasta quedarse fuera de los diez primeros puestos, lo que nos sitúa en una situación verdaderamente preocupante», advierte.

Este descenso, según ILGA Europa, se debe a la falta de una legislación estatal que garantice los derechos de las personas LGTBQI en todo el territorio. Algunos aspectos fundamentales, como la prohibición de las terapias de reconversión, las políticas para el fomento del empleo de las personas trans o las medidas para erradicar la discriminación contra el colectivo en los ámbitos sanitario o educativo solo se garantizan en determinadas autonomías.

Las Cortes de Aragón sí que aprobaron en la pasada legislatura leyes para proteger a gays, lesbianas, bisexuales y trans. Falta su desarrollo y aplicación, una tarea que tendrá que afrontar el próximo Gobierno de Aragón.

ILGA Europa también señala como causa del descenso de España en el ránking la falta de reconocimiento del derecho a la autodeterminación del género. Las personas trans aún tienen que ser diagnosticadas de disforia de género para cambiar sus documentos oficiales, y solo tras dos años de tratamiento hormonal, si son de nacionalidad española y mayores de edad.