Un claro reflejo de esta nueva realidad es el fuerte aumento de la petición de ayudas para conseguir alimentos por parte de familias y colectivos en todo el país. La Federación Española de Bancos de Alimentos (Fesbal) calcula que, en sus 54 centros asociados, entre los que se encuentra el de Zaragoza, la demanda se cuadruplicado en las últimas semanas.

«Hay personas que acuden a nosotros o a organizaciones que reparten alimentos diciendo que estoy en una situación difícil, tengo hijos, estoy en paro, no puedo trabajar, no tengo ingresos, qué tengo que hacer… Eso ha multiplicado por cuatro el número de personas que requieren alimentos», explica Ángel Franco, portavoz de Fesbal.

Pero el hambre no es lo único que se ha disparado con la pandemia. En paralelo a la necesidad también ha ido creciendo la solidaridad. La Fundación la Caixa y CaixaBank lanzaron el día 1 de abril Ningún Hogar Sin Alimentos, una acción solidaria de recogida de donativos en favor de los bancos de alimentos, afectados por el desabastecimiento. Apenas cuatro semanas después, la iniciativa había superado ya el millón de euros recaudados para paliar los efectos de la crisis del coronavirus.

Al finalizar abril, más de 16.000 donantes se habían unido ya a la causa, realizando una aportación económica a través de los canales operativos de CaixaBank, por Bizum, en el número 38014, enviando un SMS con la palabra «ALIMENTOS» al 38014, o en la web www.ningunhogarsinalimentos.org, donde la campaña seguirá abierta durante todo el mes de mayo.

Debido a la creciente demanda, y a la buena acogida de esta acción solidaria, la Fundación la Caixa ha decidido doblar la aportación con un millón de euros adicional. Esto sumará un total de dos millones de euros, que se distribuirán entre los 54 bancos asociados en Fesbal.

«Ahora mismo, nuestra mayor responsabilidad es tratar de que nadie quede atrás. Y, en este punto de la emergencia social y sanitaria, todos hemos de velar para que las familias más vulnerables tengan cubiertas sus necesidades básicas. Por ello, queremos doblar la ejemplar y generosa respuesta de la ciudadanía e incentivar su colaboración y aportaremos un millón de euros más», ha explicado el presidente de la Fundación Bancaria la Caixa, Isidro Fainé.

Ante la nueva coyuntura, los bancos de alimentos han establecido un dispositivo de servicios mínimos tras la suspensión de las operaciones presenciales de recogida de alimentos y otras donaciones, debido a las restricciones impuestas por el estado de alarma. De este modo, para mantener las existencias en sus almacenes, estos centros humanitarios necesitan aumentar sustancialmente la compra de comida, así como contar con donaciones económicas para paliar la falta de recursos. La campaña Ningún Hogar Sin Alimentos pretende compensar la suspensión de dichas operaciones presencias.

Esas carencias irán a más si la ciudadanía y las instituciones no responden a esta llamada a la solidaridad. En el 2019, las 54 entidades adheridas a Fesbal atendieron 1,1 millón de peticiones, repartiendo 144,5 millones de kilos de comida en colaboración con más de 7.300 instituciones benéficas. Este año, las atenciones podrían superar los 1,7 millones del año 2014, cifra récord alcanzada en los peores momentos de la anterior crisis.