Más de mil periodistas fueron asesinados entre el 2006 y el 2017 en todo el mundo. Por primera vez en el 2017, la mayoría de los periodistas asesinados (55%) lo fueron en países libres de conflictos armados. Y la impunidad por estos crímenes sigue siendo alarmante, ya que solo uno de cada diez casos fue perseguido por la Justicia. Estos y otros datos se desprenden del informe del 2018 de la Dirección General de la Unesco sobre la seguridad de los periodistas y la cuestión de la impunidad, publicado con motivo del Día Internacional para poner fin a la impunidad de los delitos contra los periodistas, que se celebra el 2 de noviembre.

Las Naciones Unidas conmemoran esta jornada desde el 2013 para evaluar los esfuerzos desplegados para responder a los problemas de seguridad que enfrentan los periodistas en el ejercicio de su labor y a la impunidad de los crímenes en su contra. Aunque en los últimos años se ha logrado avanzar en términos de sensibilización de la opinión pública, las cifras recuerdan la necesidad de proseguir los esfuerzos para que estos crímenes se investiguen. Entre el 2014 y el 2018 fueron asesinados más de 500 periodistas en el ejercicio de sus funciones. Y en lo que va de año los casos mortales alcanzan la cifra de 44. «La lucha contra la impunidad forma parte integrante de la libertad de expresión, la libertad de prensa y el acceso a la información. Reforzar la seguridad de los periodistas que toman riesgos para informarnos no es solamente un deber indispensable, sino también un desafío de la democracia», declaró la directora de la Unesco, Audrey Azoulay.

Otro fenómeno notable: el porcentaje de mujeres periodistas asesinadas en desempeño de su trabajo también ha aumentado en el último decenio. En 2017 fueron asesinadas once periodistas -un 34% de los asesinatos-, la cifra más alta en el último decenio. El informe indica además que las mujeres periodistas son más vulnerables a amenazas relacionadas con su género, como el acoso sexual y verbal y el ciberacoso. Por otra parte, los reporteros locales, que a menudo cubrían casos de corrupción, delincuencia y política, constituyen el 90% de todos los periodistas asesinados en el 2017, pero su asesinato recibe mucha menos atención mediática que la que se presta a los de periodistas y corresponsales extranjeros.

El 2 de noviembre, desde la Unesco se lanzó, en asociación con varios medios de comunicación, la campaña #LaVerdadNuncaMuere, producida de manera gratuita por la agencia creativa DDB. En el 2013, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó esta fecha como el Día Internacional para Acabar con la Impunidad por Crímenes contra Periodistas para instar a los Estados miembros a que adoptaran medidas concretas para luchar contra la cultura de la impunidad. La fecha se eligió en conmemoración del asesinato de dos periodistas franceses, Ghislaine Dupont y Claude Verlon, en Malí el 2 de noviembre del 2013, mientras cubrían las elecciones legistativas de dicho país.