- Informes de Unicef o la Fundación la Caixa señalan que la exclusión social se hereda en España. ¿Puede romperse ese círculo?

- Es muy difícil pero solo hay una palanca para ello: la educación. Es la clave, pero requiere un acompañamiento muy personalizado. Estos meses, la falta de recursos económicos y de conocimientos digitales han agrandado la brecha de formación digital en España. Muchos escolares no han podido seguir un aprendizaje con herramientas digitales. Y este es un gran reto que tenemos como sociedad. La tecnología genera grandes ventajas, pero tenemos que trabajar para que sea justa e inclusiva, para que las personas estén en centro de nuestra toma de decisiones. Ahora más que nunca venimos trabajando con diferentes programas en nuestra compañía para que nadie se quede atrás.

- ¿Cómo los han adaptado a las nuevas circunstancias?

- Esta crisis ha acelerado los procesos de digitalización y nos ha demostrado que no hay una vida digital y otra analógica, sino que son la misma cosa. Los colegios y las entidades que trabajan con programas de formación para el empleo van a tener que caminar hacia un modelo integral en el que convivan el aprendizaje presencial con el virtual. El problema es que muchos docentes o formadores de estas entidades no tienen las competencias digitales adecuadas, y además los centros educativos no están preparados, y se ha demostrado que la traducción literal de la clase presencial a la online no funciona. Las nuevas tecnologías generan una oportunidad de continuar con el aprendizaje y todas las organizaciones que disponemos de una oferta de formación online, también para docentes, hemos visto cómo han crecido los usuarios de forma exponencial, concretamente un 380% en nuestra plataforma de empleabilidad Conecta Empleo.

¿Qué han aprendido?

- Que no es suficiente con ofrecer estos cursos online de autoaprendizaje, ya que hace falta un acompañamiento más personalizado en el entorno virtual. Por ello, en tres meses de pandemia, además de los cursos online, hemos ofrecido mil talleres formativos para 4.600 educadores y más de 10.500 participantes.

- ¿Cuáles son las profesiones con más demanda?

- Ahora mismo, hablar de demanda es complejo, además de que genera una incredulidad a las personas que están perdiendo su empleo, pero es cierto que en perfiles digitales sigue siendo alta. Las empresas están viviendo un proceso de transformación digital potente, y para ello el talento digital es lo más importante, además de la tecnología e infraestructura necesarias. Por tanto, programadores en diferentes lenguajes o tecnologías, expertos en big data o en ciberseguridad son ahora mismo los perfiles más buscados. Pero además las empresas están demandando otras competencias imprescindibles, las transversales, que hacen del trabajador una persona versátil para adaptarse a las necesidades que vayan apareciendo.

- ¿Son estas profesiones del futuro la apuesta de la Fundación Telefónica para luchar contra el paro juvenil?

- Por supuesto, apostamos por esas competencias digitales que demanda el mercado y ofrecemos diferentes oportunidades de mejorar la empleabilidad y las competencias transversales a través de distintos formatos y modelos metodológicos, que se adaptan a cada entorno o colectivo. Están los cursos del programa Conecta Empleo, de 30 a 40 horas de duración, cuyo fin es despertar el interés y ofrecer unas nociones iniciales en alguna tecnología. En paralelo, estamos ofreciendo otras opciones, como el mapa del empleo (https://mapadelempleo.fundaciontelefonica.com/) o el orientador profesional virtual (https://orientador.fundaciontelefonica.com/).

- ¿Y para otros perfiles?

- Según el nivel de conocimientos digitales y competencias transversales que tienen los participantes, buscamos la solución más se adapte a cada uno de ellos. Hay programas como Lanzaderas Conecta Empleo, que realizamos con la Fundación Santa María La Real, que logran más de 60% de inserción laboral. Y dentro de Conecta Empleo hay iniciativas dirigidas a diferentes franjas de edad o perfiles de entornos más vulnerables. Así mismo, hemos traído a España 42, una metodología muy innovadora que rompe las reglas de la educación y con una inserción del 100%, pensada para personas que quieren reinventarse o profundizar en la formación para ocupar uno de los perfiles digitales que demanda el mercado laboral.

- ¿Tienen alguna posibilidad en el sector tecnológico las personas con difícil inserción laboral?

- El de la tecnología, así como muchos sectores, están cambiando. Hoy, muchas empresas, además de mirar los conocimientos, buscamos empleados con valores, con capacidad de trabajar en equipo y de adaptarse a los cambios, con tolerancia a la frustración, proactividad, liderazgo… con actitud. Y estas competencias se encuentran también en esas personas con difícil inserción laboral. Muchas veces, lo primero que hay que trabajar con ellas es la confianza en sí mismas. La oportunidad va a llegar, antes o después, pero va a llegar, y tiene que cogerles preparados, que no parados.

- ¿Es fundamental la alfabetización digital para romper la exclusión laboral?

- Rotundamente, sí. La digitalización está ya presente en cada rincón de nuestra vida. Es inviable que queramos vivir en un mundo 100% analógico, por tanto, hay que trabajar con todos los colectivos que tienen más dificultades desde los conocimientos más básicos dentro de la formación digital. Algunos de nuestros programas empiezan desde cómo hacer una cuenta de email, cómo utilizar aplicaciones para buscar empleo o hacer un currículo online. La capacidad que tiene la tecnología es infinita y aumenta exponencialmente las oportunidades de encontrar empleo. Hay que tener una visión muy optimista de la tecnología, pero en paralelo pensar en que es el momento de las personas, porque si algo tenemos claro en la Fundación Telefónica es que la tecnología habilita, pero las personas transforman. H