Las prácticas sexuales de riesgo son cada vez más comunes y, asociadas a ellas, el VIH y las infecciones de transmisión sexual (ITS) no dejan de aumentar, especialmente entre la población joven. En Zaragoza acaba de levantarse un muro de contención frente a estas enfermedades. Se trata del nuevo Centro de Información y Prevención de Infecciones de Transmisión Sexual, que será conocido como ZIPI.
Su apertura “responde a la necesidad de un centro comunitario sociosanitario para trabajar la prevención y el cribado del VIH y las ITS, también desde un punto de vista educativo, ya que aún no existía ninguno en Aragón”, explica Juan Ramón Barrios, presidente de Omsida. Esta oenegé es la responsable de la puesta en marcha del nuevo centro, que “se venía reclamando hace tiempo desde todas las partes” implicadas en la lucha contra el sida y las ITS, “tanto la sanitaria como la social, así como por buena parte de la ciudadanía”, asegura Barrios.
Hasta ahora, la puerta de entrada para abordar el tratamiento del VIH y otras ITS era exclusivamente la atención primaria, “con las limitaciones que supone hablar de sexualidad con un médico de cabecera, por ambas partes”, opina el presidente de Omsida. “Muchos médicos de familia no están preparados, y muchos pacientes no quieren hablar del tema con ellos. Nuestro espacio es confidencial, anónimo y gratuito, y la principal novedad es que se centra solo en el VIH y las ITS”.
La necesidad de este nuevo equipamiento no es exclusivamente social, sino que viene avalada por datos científicos. Los informes epidemiológicos del Ministerio de Sanidad y del Gobierno de Aragón indican un claro aumento de las ITS en los últimos años, “de una forma preocupante, lo que supone un problema de salud pública”, advierten desde Omsida.
Infecciones como gonorrea, sífilis, clamidia, el virus del papiloma humano, y un relajo en el uso del preservativo entre los y las jóvenes, pueden conducir a problemas de salud graves como infertilidad, trastornos neurológicos y cardiovasculares, muertes pre y neonatales y aumento del riesgo de contraer otras infecciones, como el VIH.
Sin embargo, a menudo, las ITS pasan desapercibidas porque las personas afectadas no son conscientes de que las han contraído, así que no buscan ayuda y siguen transmitiéndolas. Por ello, la puesta en marcha de este centro será una importante contribución al acceso a la información, la prevención, la detección precoz y para reducir el diagnóstico tardío. Y es que, además de la realización gratuita de pruebas rápidas de ITS, de forma anónima, desde el ZIPI se trabajará también la sensibilización y la educación de la población aragonesa, buscando la reducción de daños.
A todas las personas que acudan al centro se les hará una serie de preguntas mientras se realizan las pruebas, para ver si conocen lo que son las prácticas de riesgo y cómo prevenir las ITS. Se les asesorará sobre nuevos tratamientos, como la profilaxis preexposición. Y para las personas que sean usuarias de sustancias estupefacientes en sus prácticas sexuales, “tenemos educadores formados en esta materia específica para apoyarles y ayudarles en lo que necesiten y para derivarles a los servicios específicos del Ayuntamiento de Zaragoza o del Gobierno de Aragón”, explica Barrios.
De este modo, Omsida va un paso más allá, tras 26 años prestando apoyo psicosocial a las personas afectadas por VIH o ITS mediante atención psicológica, social y laboral, así como formación e información en prevención y sensibilización al respecto. “Como asociación de personas afectadas, sabemos perfectamente lo que significa vivir y convivir con el VIH. Las ITS limitan la calidad de vida y pueden afectar también a las relaciones sociales, por el estigma que llevan asociadas, por lo que tratamos de frenar su expansión. Y, para ello, la educación y la información son herramientas esenciales de prevención”, afirma su presidente.
El ZIPI está ubicado en el zaragozano barrio de la Magdalena, en el número 10 de la calle Barrioverde. Cuenta con una zona de espera y dos salas para pruebas y atenciones individuales, dotadas con todo el equipamiento necesario. Está atendido por una médico y dos enfermeros. Hay que concertar cita previa por teléfono (976 201 642 y 664 588 972) o vía web (www.omsida.org).
Durante la realización de la prueba, el personal ofrece orientación y apoyo al paciente. El resultado se conoce en el plazo aproximado de una hora y, si es negativo, se le informa de la necesidad o no de repetirla, según cuándo se haya producido la práctica sexual de riesgo. Además, se le asesora sobre los comportamientos más seguros para evitar la infección.
En caso de resultado positivo, se le explica al usuario el procedimiento a seguir. Se le ofrece la posibilidad de concertar una cita en los días siguientes para tratar el shock que produce la noticia y se le facilita la derivación a los servicios sanitarios pertinentes. Además, se le informa de los servicios ofrecidos por Omsida, tanto para las personas afectadas por VIH como para sus familiares y su entorno social más cercano.
