La violista Julia Lorenzo impulsa el Espacio Betovi en Zaragoza, un modelo innovador e inclusivo para vivir la música en todos los sentidos. Músicoterapeuta, técnico superior en educación infantil, graduada superior en música (viola) y especializada en métodos de enseñanza musical desde edades tempranas, Lorenzo cuenta con amplia experiencia en voluntariado con diversos proyectos solidarios.
La volinista impulsó hace dos años la Asociación Betovi para romper barreras y hacer accesible el aprendizaje de la música a todas las personas. «Si una persona no puede aprender de la manera que se le enseña, es mejor enseñarle de la manera en la que pueda aprender».
Esta frase de Marion Welchmann es el concepto con el que Betovi trabaja desde sus inicios y en todas las actividades que ofrece, desde la música para bebés, música y movimiento a partir de los 3 años, Music Mind Games, a partir de los 6 años, hasta las clases de violín y viola están adaptadas para que los niños y adultos con discapacidad intelectual y autismo puedan participar en cualquiera de ellas.
El enfoque social de su proyecto forma parte del ADN de Julia Lorenzo, que cuenta con una amplia trayectoria junto a proyectos como Musethica, de la que es coordinadora en España, da clases de violín para personas con discapacidad intelectual y autismo en la Fundación Cedes, y hace sesiones de música para los bebés ingresados en el Hospital Infantil Miguel Servet.
A partir de octubre, Julia Lorenzo amplía sus locales, lo que le permitirá ampliar las plazas, muy demandadas, tanto para niños a partir de seis años como para el resto de las actividades.
