Las oenegés españolas han solicitado elevar la Ayuda Oficial al Desarrollo para que alcance el 0,5% de la Renta Nacional Bruta (RNB) en la presente legislatura, como uno de los retos para empezar a trabajar en el 2020. Así lo pusó de manifiesto el presidente de la Coordinadora de Organizaciones de Cooperación para el Desarrollo (CONGD), Andrés R. Amayuelas, que también pidió para el nuevo año recuperar la cooperación para el desarrollo como una política pública, previsible y bien dotada económicamente y establecer una hoja de ruta para un pacto de Estado de la cooperación.
En la misma línea, el director ejecutivo interino de Oxfam Intermón, José María Vera, solicitó más «peso» de la cooperación española en los Presupuestos Generales del Estado, una apuesta por el desarrollo sostenible no solo desde el punto de vista ambiental sino también equitativo o una política fiscal «renovada» para luchar contra las desigualdades.
En cuanto al balance del 2019, Amayuelas aseguró que en el lado positivo del año aprecian «la voluntad del Gobierno por cambiar el rumbo de la política de cooperación». Sin embargo, apuntó que la propuesta de los PGE 2019 -que aumentaba la AOD en 307 millones- «no estaba a la altura de las necesidades».
Si bien consideró que se ha avanzado en «una mayor ambición en la implementación de la Agenda 2030 y en la agenda climática en Europa» y ve «muy oportuno» el inicio del debate sobre la reforma del sistema de cooperación española, creándose una subcomisión específica en la Comisión de Cooperación Internacional en el Congreso.
Además, lamentó que España, con 2.180 millones de euros destinados a la Ayuda Oficial al Desarrollo, que descendió del 0,19% al 0,18% de la RNB, «continúa a la cola de Europa»; y criticó que no se ha avanzado en coherencia de políticas para el desarrollo sostenible, ya que «España continúa vendiendo armas a países en conflicto y que violan derechos humanos; la ley mordaza continúa vigente; y se retrasa la aprobación de una Ley de Transición Energética y Cambio Climático que contenga un capítulo de Justicia Climática Global».
