Naciones Unidas pide casi 3.000 millones de dólares (unos 2.400 millones de euros) para atajar la tragedia en Yemen, en la que ya es considerada como la peor crisis humanitaria de este momento en el planeta. La ONU hizo ayer esta petición en la conferencia de donantes celebrada en Ginebra, en la que la Unión Europea se comprometió a aportar más de 100 millones.

Según el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, unos 18 millones de personas sufren inseguridad alimentaria. Esta cifra supone un millón más que hace un año, cuando la organización celebró la anterior conferencia de donantes para Yemen.

Arabia Saudí, que a pesar de estar masacrando al país también participa en la conferencia, lidera una coalición militar árabe que hace tres años emprendió una guerra contra la milicia de los hutíes, que empujaron al gobierno al exilio y siguen controlando la capital y el norte del país.

La delegación saudí recordó que son el mayor contribuyente para Yemen, y que en los últimos tres años han aportado más de 10.000 millones de dólares. Acusó a los hutíes, que cuentan con el apoyo de Irán, de bloquear y saquear la ayuda internacional y de cobrar «altas tasas a todo lo que dejan entrar al país», de reclutar niños soldados y lanzar cohetes a territorio saudí.

Por su parte, la Comisión Europea (CE) prometió 107,5 millones de euros, mientras que Estados Unidos ofreció 87 millones de dólares.

Los tres años de guerra en Yemen han colocado al país, que ya era el más pobre de la región, en una situación catastrófica, con tres cuartas partes de la población (22 millones) que necesitan ayuda humanitaria y protección.