El barco de la oenegé española Proactiva Open Arms ha retomado los rescates de inmigrantes en el Mediterráneo central a pesar de la política de puertos cerrados de Italia, informó en Twitter su fundador, Óscar Camps.

En su primera operación, la tripulación del Open Arms rescatado una lancha neúmatica frente a la costa de Libia con 40 personas a bordo, entre ellas cuatro bebés y tres mujeres embarazadas con alto nivel de deshidratación tras tres días de travesía.

Camps tomó esta decisión la semana pasada y la compartió a través de Twitter: «Esta foto me ha dolido más que la de (niño sirio) Aylan. Seis meses bloqueados. No aguantamos más. Levamos anclas y nos vamos. Antes presos que cómplices. #NiUnaMas», tuiteó Camps, junto a la foto del padre y su hija ahogados en el río Bravo en la frontera entre Estados Unidos y México.

El barco de la organización humanitaria se encontraba en el puerto de Nápoles (sur de Italia) para mostrar su interior a los ciudadanos y explicar sus tareas y ahora se implicará en los rescates, siendo la única nave en aguas del Mediterráneo central.

Las autoridades españolas impidieron al Open Arms participar en rescates, y tras cien días bloqueado en el puerto de Barcelona, permitieron que zarpara el pasado abril para llevar ayuda humanitaria al Egeo, pero sin participar en salvamentos.

Por otro lado, la Justicia italiana, en concreto la Fiscalía de Ragusa (sur), mantiene abierta una investigación contra dos miembros de la oenegé española Open Arms: la jefa de misión, Anabel Montes, y el capitán, Marc Reig, acusados de favorecer la inmigración ilegal.

El ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, mantiene cerrados sus puertos a los barcos de las oenegés que salvan vidas en el mar. Una prohibición blindada por un decreto que establece multas a quien la quebrante y que el 28 de junio fue violada por el Sea Watch, que entró sin permiso en aguas italianas.