A raíz del acercamiento a colectivos vulnerables iniciado en 1996 por la Fundación Cruz Blanca a través de su proyecto antidrogas O’Cambalache, la entidad oscense fue desarrollando su programa de atención integral a personas prostituidas y víctimas de trata.

Entre los objetivos del proyecto destaca la detección de situaciones de trata existentes en el ámbito de intervención del programa con el fin de facilitar atención y protección de las víctimas mediante los recursos propios de la entidad o de la red de trata de personas.

Otro de sus objetivos es facilitar una adecuada incorporación sanitaria, social y laboral de las personas prostituidas o tratadas, promoviendo su acceso a los recursos públicos del territorio y fomentando su autonomía personal.

Y la última de las finalidades es sensibilizar a la población general sobre el fenómeno de la trata de personas, haciendo especial hincapié en la formación de los profesionales de los sectores social, sanitario y fuerzas y cuerpos de seguridad del estado que intervienen con las víctimas de trata en su función profesional.